El militante Carlos Garaikoetxea
El ex presidente del Gobierno vasco, Carlos Garaikoetxea, acudió ayer a la Feria de Muestras de Bilbao para participar, "como un militante más", en la conmemoración del día de la patria vasca. El ex lendakari, que llegó al recinto flanqueado por el senador guipuzcoano Joseba Elosegui y el dirigente vizcaíno Sabin de Zubiri, fue recibido por la mayoría de los asistentes con emocionados vítores y aplausos.Garaikoetxea permaneció en primera fila, atento al discurso de sus compañeros de partido y escuchó impertérrito indirectas descalificaciones hacia su persona. Al finalizar el acto evitó realizar declaraciones ya que, según dijo, "hoy no me toca hablar a mí".
En medio de un clima de gran crispación, tras las últimas declaraciones realizadas por los dirigentes del aparato del PNV en relación a los homenajes que diversas agrupaciones del partido están brindando a Carlos Garaikoetxea, el ex lendakari acudió, visiblemente preocupado, al acto de celebración del Aberri Eguna. Flanqueado por sus incondicionales Joseba Elosegui y Sabin de Zubiri y rodeado de una veintena de ertzainas de Guipúzcoa que se habían prestado voluntariamente a realizar las labores de protección, Garaikoetxea se sentó en primera fila y, poco antes de comenzar el acto político, repetía, visiblemente nervioso, a los amigos que acudían a saludarle: "A ver qué pasa".
Ninguna mención de reconocimiento por los servicios prestados durante cinco años al mando del Gobierno autónomo salió de la boca de los oradores del PNV. Ello seguramente no tendría importancia alguna si no fuera porque destacados representantes del partido se esforzaron en mencionar, uno a uno, a los antiguos presidentes del Gobierno vasco y a los más destacados dirigentes del nacionalismo.
Al finalizar el acto político, Carlos Garaikoetxea fue abordado por los periodistas; sin embargo, declinó hacer declaraciones, ya que, según él mismo dijo, no era su turno. No obstante, no pudo evitar la tentación de gritar "gora Euskadi askatuta", ante los micrófonos apagados de los periodistas que habían desistido de obtener alguna impresión del ex lendakari en relación a los mensajes de los dirigentes del PNV.
Por otro lado, el ex consejero de Sanidad del Gobierno vasco, Ángel Larrañaga, que participó en Bermeo (Vizcaya) en otro acto conmemorativo del Aberri Eguna, propuso cuatro puntos para solucionar la crisis interna del PNV, que, según dijo, son defendidos por quienes mantienen posturas críticas hacia la actual dirección del Partido Nacionalista Vasco.
Entre los puntos propuestos figuran los siguientes: "Orientar a los amigos y desorientar a los adversarios políticos, ya que la dirección actual es aplaudida por los adversarios y está desorientando a las bases"; acabar con la política de expulsión de militantes y, por el contrario, amnistiar a los ya expulsados; no primar a las instituciones territoriales en detrimento del propio Gobierno vasco -"si primamos las instituciones territoriales, vamos en contra de la creación de la patria vasca"-, y favorecer las críticas internas sin generar divisiones.
