El Ayuntamiento de Valencia decide municipalizar el servicio de autobuses urbanos
La comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia decidió ayer, con los votos favorables de socialistas y comunistas y la abstención del Grupo Popular, iniciar el proceso de municipalización de la Sociedad Anónima Laboral de Transportes Urbanos de Valencia (SALTUV). La junta general de accionistas de esta sociedad laboral, integrada por trabajadores de la empresa, ya se pronunció a favor de la cesión de la firma, siempre y cuando el ayuntamiento municipalizara el servicio.
El consistorio viene sufragando desde hace varios años el déficit económico de la empresa, que asciende a cerca de 900 millones de pesetas. Según el estudio técnico que ha barajado el ayuntamiento, los transportes públicos de superficie son deficitarios en la mayoría de las capitales europeas y americanas, lo que obliga a una financiación por parte de las instituciones públicas. "Si la corporación debe subvencionar de forma permanente este servicio", señaló ayer José Cabrera, concejal de Tráfico y Transportes, "lo lógico es que el propio ayuntamiento controle directamente la gestión de SALTUV".El futuro consejo de administración de la empresa será nombrado por el ayuntamiento, y el alcalde de la ciudad será previsiblemente el presidente de este órgano de direccion. Los estatutos,contemplarán la presencia en el consejo de administración de representantes de las asociaciones de vecinos y de los sindicatos. El informe económico de SALTUV apunta la necesidad de renovar la flota de autobuses, que en la actualidad está integrada por 306 vehículos, y a la hora de las previsiones calcula el crecimiento de la ciudad de Valencia en un 1% anual. Otro tema preocupante es la deuda de 1.800 millones de pesetas que la sociedad laboral tiene contraída con la Seguridad Social, si bien la corporación municipal confía en saldarla a través de los presupuestos de liquidaciones de deudas que el Estado tiene previsto destinar para los déficit de las grandes ciudades.
Para sanear la situación económica de SALTUV, el ayuntamiento ha estudiado la posibilidad de aumentar la cobertura económica procedente de las tarifas, aunque esta solución presenta el inconveniente de un descenso de viajeros como respuesta al incremento del precio de los billetes. La desastrosa gestión económica de la empresa en el pasado ha tenido graves consecuencias en el descenso del número de viajeros, que sólo se frenó en los últimos años a partir de la entrada en funcionamiento de nuevas líneas y del aumento de la velocidad comercial.
