Un ayuntamiento del Maresme clausura dos locales que albergaban trabajadores africanos
El Ayuntamiento de Malgrat de Mar, en la comarca del Maresme (Barcelona), procedió ayer a clausurar un hotel en el que se hacinaban más de 150 trabajadores africanos, cuando su capacidad teórica era de 59 huéspedes. El ayuntamiento anunció días atrás que cerraría el hotel Montana dadas las precarias condiciones higiénicas y sanitarias del mismo y su irregular situación legal. Además de este hotel ha sido clausurado un garaje, situado junto a un vertedero de basuras en el barrio de la Verneda, en donde vivían unos 50 africanos en un local sin ninguna clase de compartimentación ni servicio alguno.El hotel Montana, que había sido dado de baja hace unas semanas por su propietario, José María Sánchez Sánchez, no reunía las más mínimas condiciones de habitabilidad. En varios pisos del mismo no existía suministro de luz eléctrica y era nulo el servicio de limpieza en todas sus dependencias. Las habitaciones, que en su mayoría apenas superan los seis metros cuadrados, alojaban hasta siete u ocho africanos cada una, los cuales cocinaban sus alimentos en las mismas utilizando pequeños fogones de butano o de petróleo.
