La mayoría de la emigración reclama derechos políticos y ayudas para los que desean volver
La mayoría de la emigración española manifiesta fuertes apoyos al Gobierno socialista, cuya gestión consolidará la democracia, aunque no conseguirá mejoras en la crisis económica, a juicio de un amplio sector. Paralelamente se plantean numerosas reivindicaciones: reconocimiento de todos los derechos civiles y políticos, garantías de un puesto de trabajo en España -para sí y para sus hijos- y, mientras tanto, gestión de convenios internacionales que les garanticen trato igualitario en sus actuales países de residencia. Un tercio de la emigración de la década de los sesenta, y porcentajes aún más elevados de las épocas más recientes, volverían a España si tuvieran trabajo en nuestro país. Éstas son algunas de las conclusiones que se desprenden de un amplio estudio realizado por la empresa Sofemasa, por encargo del diario La Región, que ha efectuado un gran esfuerzo para hacer llegar los cuestionarios a todos los países donde residen españoles.
El trabajo se ha visto muy condicionado por factores como la dispersión de los emigrantes y el propio método empleado, que es una encuesta por correo, lo cual ha obligado a la dirección técnica del estudio a aplicar coeficientes de ponderación adecuados para hacer la muestra estadísticamente representativa.Más de Ja mitad de los encuestados (52%) afirma que los españoles residentes en el extranjero deben tomar parte activa en la política española. A la pregunta de si deberían tener. representación específica en las Cortes, el 43% considera que el trato debe ser el mismo que el de los residentes en España, y tan sólo el 3% afirma que no vale para nada tener representación en las Cortes. El resto indica fórmulas diversas -representación a través de los partidos, escaños en el Senado- y el 10% del total de la muestra solicita un trato especial en este terreno.
La gran mayoría de los emigrantes juzga positivo el cambio político experimentado en España hacia la democracia. Sólo el 8% de los encuestados juzga "poco o nada positivo" ese proceso. La afiliación a partidos españoles es muy baja: se limita al 6% de los encuestados.
Sistema de voto ineficaz
Más de la mitad afirma encontrarse censada en España, con porcentajes altos en Europa y más bajos entre los residentes en América, especialmente en Estados Unidos. Saben seguro que no están censados el 28% del total, y el 15% ignora si lo está o no. Casi la mitad de los que no se censaron afirman que desconocían cómo hacerlo, y prácticamente la otra mitad se muestra partidaria de un sistema de censo automático.
Queda perfectamente claro, en el análisis, de los resultados, que la gran mayoría de los emigrantes españoles no puede ejercer sus derechos políticos por impedimentos ajenos a ellos. De los que dicen haber votado en las últimas elecciones, existe división de opiniones sobre las facilidades recibidas para hacerlo: aproximadamente la mitad afirma que no tuvo problemas, y el resto tropezó con diversas dificultades e inconvenientes.
El mecanismo vigente para enviar los sufragios desde el extranjero ha sido muy criticado, por nuestros emigrantes: el problema fundamental es que no les llega a tiempo la información sobre las ofertas políticas realizadas por los partidos, o ni siquiera pueden ejercer el voto en el -plazo previsto (56% entre ambas respuestas). Otro 18% considera "muy complicado" el sistema actual de sufragio. Para resolver los problemas advertidos, la mayoría de los emigrantes (54%) se muestra a favor de votar a través de los consulados o embajadas de España, mientras que el 24% propone que se les pague el viaje a España a los que quieran votar.
A juzgar por los resultados de esta encuesta, la mayoría de la emigración española en el extranjero ha acogido positivamente. el triunfo del Partido Socialista Obrero Español en las últimas elecciones legislativas celebradas hasta ahora. El 77% de los encuestados considera favorable ese resultado -el 38% llega a decir que fue. "muy positivo"-, mientras que sólo un 8% lo califica de negativo, y otro porcentaje similar se muestra indiferente respecto a lo sucedido en las elecciones. Por países, la emigración española residente en Argentina, Venezuela Holanda y la República Federal de Alemania son las que registran el mayor ambiente favorable hacia el triunfo socialista, mientras que la de Estados Unidos registra el mayor porcentaje de opiniones negativas hacia la victoria del PSOE.
Las cosas van a mejorar en España con el Gobierno socialista, según espera más de la mitad de los emigrantes (exactamente, el 53% de los encuestados). Por países de residencia, este nivel de confianza es mayor entre los residentes en Bélgica, Argentina, Holanda, República Federal de Alemania y Venezuela. Un porcentaje nada desdeñable (21 %) afirma que todo seguirá igual. El 10% de los emigrantes son de la opinión de que las cosas empeorarán con el Gobierno del PSOE, la mayor parte de ellos localizados en el continente americano, y especialmente en Estados Unidos.
Según el estudio, los aspectos que mejorarán con la gestión del actual Ejecutivo es la consolidación de la democracia (3,8% de respuestas) y las relaciones internacionales (23%). El porcentaje de los que piensan que mejorará la cultura" es idéntico al de quienes creen que será mejor la situación laboral (14% en ambos casos). La crisis económica es lo que más puede empeorar, en opinión del 30% de los encuestados, frente a sólo un 14% que confía en mejoras en dicho terreno.
Para redondear mejor este tema, una de las preguntas del cuestionario se dirigía a averiguar sí el Gobierno actual ofrece a cada encuestado una sensación de confianza o de desconfianza. Los que se muestran confiados son el 71%, porcentaje muy superior a los que desconfían (12%). Dicen confiar en el PSOE un mayor porcentaje de españoles residentes en Europa (74%) que en América (66%).
En la misma tónica de apoyo a la democracia, una mayoría considerable de entrevistados (67%) considera beneficioso el hecho de que España sea un Estado de autonomías, un 15% lo juzga perjudicial y el resto se muestra indiferente. Los emigrantes procedentes de las islas, así como los catalanes, son los más favorables a la configuración autonómica de España. Los madrileños registran el mayor nivel de disconformidad.
Numerosas reclamaciones
La emigración española en el extranjero plantea un amplio número, de reivindicaciones al Gobierno. Casi la mitad de los emigrantes (49%) exigen el reconocimiento de todos sus derechos civiles y políticos en nuestro país petición inmediatamente seguida de la de un puesto de trabajo garantizado, en el retorno a España, para ellos y para sus hijos (46%). La cuestión de los derechos políticos parece muy importante entre los residentes en Bélgica, Reino Unido y Venezuela.
La exigencia de garantías de empleo para regresar a España constituye la prioridad máxima del conjunto de la emigración europea. Los residentes en Suiza, República Federal de Alemania, Bélgica y Holanda son los más preocupados por un puesto de trabajo para volver. Respecto a la emigración residente en América, el problema del empleo para el retorno a nuestro país sólo preocupa de manera importante en Venezuela. Por regiones de origen, más de la mitad de los emigrantes que proceden de Castilla-La Mancha, Galicia, Madrid, Andalucía, Extremadura, Comunidad Valenciana y Murcia coinciden en reivindicar ante el Gobierno un puesto de trabajo a su vuelta a España.
La tercera reivindicación de los emigrantes, en orden de importancia, se refiere a la aplicación de convenios internacionales que establezcan un trato igualitario en su actual país de residencia. Lo plantea el 41 % del total y resulta especialmente significativa en la emigración europea. Andaluces, extremeños, castellano-manchegos, valencianos y murcianos son quienes más piden al Gobierno gestiones en este sentido.
Un tercio quiere que se les garantice el regreso a España bajo cualquier condición, formulación un tanto imprecisa, pero que evidencia el deseo de volver. Otro tercio pide que sus hijos puedan realmente estudiar en España.
El deseo de que los hijos puedan estudiar en España es una petición del 33% de la emigración española al Gobierno socialista. Los residentes en Venezuela y Bélgica muestran las mayores tasas de inquietud por esta cuestión.
El deseo de volver es grande, pero muchas personas critican la actual política de retorno de los emigrados. Un tercio del total piensan regresar haciéndolo por sus propios medios; son muy pocos (2%) los que afirman categóricamente que no quieren regresar a España. Estos últimos se circuriscriben a los residentes en Estados Unidos, Brasil, Argentina y personas aisladas de algún país europeo, así como a los que llevan más de 20 años fuera de España.
Hay países -Venezuela, República Federal de Alemania, Suiza, Bélgica, Holanda y el Reino Unido- muy poco apreciados como lugares donde quedarse a vivir permanentemente. Un 12% califica de "mala" la política de retorrio puesta en práctica por el Gobierrio y otro 13% asegura que no existen ayudas oficiales. Frente a ello, un 7% consideran "eficaz" dicha pollítica. Buena parte de los emigrantes (34%) piensa en sus propios medios como único medio de volver, y el 9% ya tiene decidido montar por su cuenta algún negocio.
En los textos de presentación de la encuesta, los porcentajes aparecen redondeados.
