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España-lsrael: una inexplicable demora

Escaso impacto económico de las posibles represalias árabes contra España si se establecen relaciones diplomáticas con Israel

Después de un año de declaraciones, matizaciones y desmentidos sobre el momento en que el Gobierno socialista establecerá relaciones diplomáticas con Israel, el tema sigue siendo uno de los capítulos inacabados de la política exterior española, no achacable sólo a esta Administración. Además de una mayoría de la opinión pública, todas las fuerzas políticas, socialistas, aliancistas, nacionalistas, con excepción de los comunistas, un amplio sector sindical, la casi totalidad de los empresarios, representantes de las letras y de las artes, profesores e intelectuales, en su gran mayoría, están a favor de la medida. El PAIS ha tratado de profundizar en las posibles razones objetivas de esta inacción.

La postura oficial del Gobierno socialista es que la decisión será tomada "cuando convenga a los intereses nacionales de España y cuando constituya un factor importante y real en la solución del problema palestino". El presidente Felipe González en uno de sus rnás recientes comentarios dijo que "no todos los elementos para lomar esa decisión dependen de mi", explicando a continuación que se refería a que él no puede influir para que el desarrollo de los acontecimientos en Oriente Medio se produzca como le gustaría. Al mismo tiempo desmentía que la oportunidad esperada estuviera relacionada con una posible victoria de los socialistas israelíes en las elecciones del próximo año.1983 ha supuesto, no obstante, un avance en los contactos oficiales y oficiosos entre Madrid y Tel-Aviv, con el establecimiento por primera vez de vuelos regulares de Iberia y EL AL entre las dos capitales, con dos frecuencias semanales que se ampliarán a tres en 1984 y la apertura de una oficina de Turismo israelí en España.

En numerosas ocasiones durante todos estos años de ausencia inexplicable de relaciones oficiales, se ha argumentado que existían "oscuras razones de Estado", que apuntaban, sobre todo en el período democrático, al palacio de la Zarzuela, dadas la estrecha amistad del titular de la corona con las monarquías árabes, en especial las de Arabia Saudita y la de Jordania. El otro argumento ampliamente utilizado, aún hoy, es el de las posibles represalias arabes.

Después de varias semanas de investigar ambas justificaciones, las explicaciones obtenidas por EL PAIS en altas fuentes de la Administración arrojan el siguiente resultado:

La petición de Hussein

El razonamiento que se esgrime cerca de la Zarzuela es que ante la inminencia de una decisión por parte del rey Hussein de Jordania respecto a su participación en las negociaciones de paz de Camp David y de un acercamiento del lider de la OLP, Yassir Arafat a Hussein después de su segundo fracaso por permanencer en el Líbano, el monarca hachemita habría pedido al Rey de España que se esperara al momento en que se iniciaran las conversaciones con Israel sobre la devolución de la Cisjordania para establecer las relaciones diplomáticas hispanojudias.Por lo que respecta a las posibles represalias, la investigación arroja varias conclusiones. Una primera, que demuestra la poca preocupación que existe en el Gobierno ante esa eventualidad ("No aceptaremos ningún tipo de presiones vengan de donde vengan" ha dicho el ministro Morán), es el hecho de que no se ha dado ninguna orden conereta ni a Presidencia, Exterior o Comercio para que se recoja información en este sentido y no se está preparando ningún expediente para su estudio por el Consejo de Ministros.

Las embajadas españolas en algunos países arabes han enviado en varias ocasiones recortes de prensa, sobre todo en los últimos meses cuando el tema de las relaciones díplomáticas se ha comentado en medios oficiales o políticos españoles. En los recortes de prensa facilitados en Asuntos Exteriores a este periódico procedentes de diarios en Jordania, Siria, Tunicia, Emiratos del Golfo y Arabia Saudita, sólo se recogen noticias y desmentidos sobre el tema en función de lo que se ha dicho en España. Es curioso destacar un comentario de la radio oficial de Riad del 6 de agosto pasado en el que llama la atención a los países árabes sobre la posibilidad de que España establezca relaciones diplomáticas con Israel "ya que ahora los rumores no son desmentidos por el Gobierno, como ocurría antes" y se concluye: "Esta evolución es el resultado de una disminución en la sensibilidad europea hacia los temas árabes despues de lo que, está ocurriendo en Líbano y en la OLP. Los árabes son los únicos responsables de lo que está sucediendo entre España e Israel".

Por ejemplo, en la última reunión de los países del Golfo los días 7 al 9 de noviembre, se informó que en la agenda figurarban temas de seguridad de la región y la situación en el Líbano y en la OLP. Y se especifica que no se ha tratado el tema de las relaciones con Egipto y que no ha habido acuerdo en la consideración de las relaciones con la Unión Soviética. Ninguna de las embajadas árabes en Madrid, consultadas por El PAIS ha dado su opinión sobre el tema remitiendo cualquier tipo de decisión a sus respectivos gobiernos.

Reciprocidad aérea

Cuando en abril de este año se establece el acuerdo entre Iberia y El AL, las únicas quejas árabes expresada a los responsables de Turismo en España van acompañadas de peticiones de reciprocidad. Libia solicita una escala de Iberia en Trípolí, Siria otra en Damasco y Arabia Saudita una extensión de la línea de Riad a Dubai y Abu Dabi, dos de los emiratos del Golfo Pérsico. Los dos primeros casos no han sido atendidos y el tercero esta pendiente de negociaciones previstas.en principio para este mes.Por lo que respecta a posibles represalias comerciales, las cifras de los intercambios españoles con los paíseis árabes arroja en total un déficit que superó los 4.000 millones de dólares en 1982 y que en los nueve primeros meses de 1983 es de cerca de 3.000 millones de dólares (ver recuadro). Sería inconcebible, comentan las fuentes españolas, que con ese saldo a favor, los árabes decidieran boicotear el comercio con España. Según las cifras comerciales de 1983, Espafía mantiene déficit con los países árabes más radicales en su oposición a Israel como Argelia, Irán, Libia, Irak, Emiratos, Oman, Qatar y Yemen del Sur. Ha reducido su superavit con respecto a Siria y mantiene déficit también con Arabia Satidita, país moderado, pero considerado como el rector económico de la política en Oriente Medio.

Ni siquiera con el petróleo, cuyo consumo está decendiendo desde hace tres años en Occidente, pueden perirútirse ningún tipo de medida restrictiva con España. Como dato importante a este respecto, el Instituto Nacional de Hidrocarburos señala, en sus estadísticas del mes de septiembre, que México ha desplazado a Arabia Saudita y a Irán de los dos primeros puestos exportadores de crudos a España. En los nueve primeros meses del año, Mexico vendió 5.841.000 toneladas de petróleo, Irán 5.522.000 y Arabia Saudita 3.400.000.

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