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Se mantiene la cautela de las partidas vendedoras

En las jornadas bursátiles de ayer se volvió a repetir el decorado de las sesiones anteriores con notable fidelidad. Sólo puede destacarse la menor presencia de órdenes de venta corno consecuencia del aumento en la cautela con que los vendedores ofrecían sus partidas al exiguo número de compradores que concurrían a los parqués.Los altos precios que ha alcanzado el dinero interbancario en los últimos días continúan haciendo daño a la inversión bursátil, y los esfuerzos de los especialistas por impedir que los índices generales se aproximen peligrosamente a la cota fatídica del 100% apenas llegan a servir para que las bajas resulten más moderadas, precisamente, y hay que insistir en ello, gracias a la contención de la oferta.

En las sesiones de ayer el grupo de bancos continuó ofreciendo una presencia mayoritaria de órdenes vendedoras. Banesto fue, un día más, quien, con diferencia, presentó un mayor volumen de oferta, y su saldo en el mercado madrileño en favor de las cuentas fue de 43.785 títulos, de los que se tomaba un 33% y, ello tras perder cinco enteros.

Popular e Hispano fueron las otras dos entidades que aceptaban recortes a la baja de dos puntos dentro del sector. Los demás valores bancarios repitieron casi al unísono, y en general sus responsables bursátiles expresaban muy poca confianza en la posibilidad de que se produzca un cambio de tendencia en un futuro inmediato.

Por su parte, las eléctricas consiguieron ver moderadas sus bajas el miércoles. Hidrola repitió, aunque la incógnita sobre si pagará algún dividendo el próximo mes de julio gravita sobre el ánimo de los inversores y en general parece retraer las órdenes de compra. Esta sociedad distribuyó el pasado mes de enero cincuenta pesetas como dividendo, que es la suma de los dividendos a cuenta y complementario que ha venido pagando los ejercicios anteriores.

FECSA, superada la presión vendedora a que algún grupo institucional le sometió el pasado miércoles, también repitió con cierta soltura, mientras que Iberduero reflejaba un nuevo recorte en sus cotizaciones y terminaba cerrando en la Bolsa de Madrid al 75%, y aparecía el comprador bienintencionado, pero tardío de costumbre, que intentaba barrer los últimos restos de oferta. El resto del mercado no experimentó grandes alteraciones y los operadores apenas señalaban la demanda con que cerraba Explosivos.

Telefónica, el valor que ha sido definido por algún especialista como la gran esperanza para el mes de mayo, perdió medio punto en el mercado madrileño dejando de nuevo el 70%. No obstante, los especialistas insisten en que si se produjese algún tipo de tirón en los mercados bursátiles españoles, indiscutiblemente habría de estar protagonizado por este valor, primero, por su importante peso en la composición del índice general, y segundo, porque las pérdidas que tiene acumuladas en las últimas semanas pueden colocarle en el punto de mira de algunas carteras importantes que busquen plusvalía y que estimen que si se pretende llegar a las elecciones andaluzas dentro de un clima bursátil aparentemente distinguido este será el primer valor a tocar.

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