La victoria de Laffite aumenta la emoción por el título
El francés Jacques Laffite, al volante de un Talbot, ganó el Gran Premio de Canadá de Fórmula 1, disputado bajo la lluvia, en el circuito Nôtre Dame de Montreal -según informan las agencias-. La mala elección de neumáticos por parte de Jones, Piquet y Reutemann alteró por completo el orden de la carrera, que comenzó con mucho retraso por enfrentamientos entre organizadores y pilotos. En el Mundial, a falta de una sola prueba, Reutemann sigue líder, pero ahora con un sólo punto de ventaja sobre Piquet y seis sobre Laffite.
Los problemas que enfrentaron a organizadores, por un lado, y pilotos y constructores, por otro, tuvieron su origen en una petición por parte de aquellos para que los pilotos firmaran un documento que descargase cualquier responsabilidad a los organizadores en caso de accidente. Los pilotos se negaron a ello, y descubrieron, además, que los organizadores no habían contratado el obligatorio seguro que exigen las normas.Después de muchas discusiones, las dos partes llegaron a un acuerdo, y se pudo disputar la carrera, aunque con muchísimo retraso.
En las primeras vueltas, Alan Jones se colocó en cabeza. El australiano, todavía campeón del mundo, tenía entonces posibilidades matemáticas de renovar su título. Y Jones quería jugar aún sus cartas. Pero una mala elección en los neumáticos, compartida con Reutemann y Piquet, les obligó a todos ellos a detenerse en boxes para cambiarlos, porque la lluvia, incipiente al principio de la carrera, no cesaba.Con la parada en boxes, Jones, Reutemann y Piquet perdieron prácticamente cualquier posibilidad de victoria. Salir de nuevo a la pista, con todo perdído, para lanzarse a un ataque a fondo sobre una pista mojada, exige unos nervios muy templados y un pundonor y unas ganas de llegar poco comunes. Solamente el brasileño Nelson Piquet fue capaz de hacerlo.Porque, con estos tres hombres detenidos en boxes, el francés Jacques Laffite tuvo la oportunidad de ganar la carrera, y no la desaprovechó. Se colocó en cabeza cuando desapareció de la misma Jones, y ya nadie pudo darle alcance. Lo intentó al final el británico Watson, una vez que pudo superar a Villeneuve, pero Laffite no cedió y ganó con todo merecimiento.La victoria de Laffite, unida a los abandonos de Jones y Prost -que llegó a rodar en segunda posición antes de abandonar-, y a que Reutemann terminó en un menos que discreto décimo lugar, deja el título mundial sólo al alcance de tres pilotos: el argentino Reutemann, el brasileño Piquet, separado por un sólo punto de diferencia, y el francés Laffite, a seis puntos del primero. En Las Vegas, el próximo día 17 de octubre, cualquiera de ellos puede ganar el título. Piquet, en un circuito cuyo trazado le es favorable, sólo tiene que puntuar por delante de Reutemann para ser campeón.
Sanz de Madrid, campeón de Europa
El piloto español Jaime Sanz de Madrid, piloto oficial de la fábrica germana Audi, ganó en el circuito belga de Zolder, en la última carrera del campeonato, el título de campeón de Europa de Velocidad en Turismos. Sanz de Madrid, que compartió el volante de su Audi con el piloto alemán occidental Bergmeister, cruzó la meta en segunda posición.
Victoria de Villota
Emilio de Villota se adjudicó la victoria en los Mil Kilómetros de Brands Hatch, última prueba puntuable para el Mundial de Marcas. El español, que formaba pareja en su Lola con el brítánico Guy Edwards, mandó con autoridad en la carrera tras la desaparición de Wilkenhock y de Wolleck, los dos pilotos que le precedían en la primera parte de la carrera. En la clasificación final del Mundial, Villota, pese a sus dos victorias, queda muy retrasado.
