Martínez Ovejero dimite como vicepresidente del Consejo Regional
Antonio Martínez Ovejero, senador socialista por Murcia, ha presentado su dimisión como vicepresidente del Consejo Regional, por discrepancias con la gestión de su partido en las instituciones públicas murcianas. El senador presentó su dimisión el pasado martes por la tarde, en una carta personal al presidente del Consejo Y secretario regional del PSOL Andrés Hernández Ros. «No se puede sustituir el debate abierto en los últimos meses sobre la gestión socialista en la región por un tribunal de la Inquisición», ha manifestado a este periódico Martínez Ovejero. El senador tiene pendientes actualmente dos expedientes disciplinarios ante la comisión de conflictos de su partido. La primera denuncia contra él se basa en unas declaraciones suyas en las que solicitaba de su partido una investigación sobre las críticas vertidas por el también senador ex socialista José Pérez Fernández. Este último fue expulsado del PSOE hace unos días a raíz de hacerse público un documento en el que denunciaba la existencia en la Diputación provincial de corrupción, «heredada del anterior régimen».
Con la dimisión de su cargo en el Gobierno regional, Martínez Ovejero pasa a engrosar las filas de los críticos enfrentados al aparato del PSOE murciano, cuya crisis en la región se inició con la salida del Consejo Regional de Aquilino Zapata, hasta hace unos meses responsable del área de trabajo en dicha institución. Dentro de esta dinámica de depuración socialista podría incluirse al actual vicepresidente de la Diputación Provincial, José Ignacio Gras, también denunciado ante la comisión de conflictos. Gras fue uno de los diputados provinciales el que se negaron a firmar la querella colectiva que su grupo presentó, por difamación, contra el senador Pérez Fernández. Para el vicepresidente de la Diputación murciana, éste no era método de ventilar las críticas que se hacen a la gestión del partido. De hecho, actualmente Gras sufre una discriminación que le dificulta ejercer sus funciones, caso, por ejemplo, del control del gasto de los presupuestos aprobados.
Oposición abierta
La marcha de Martínez Ovejero, quién declaró que «los cauces de participación en el partido se han cerrado y terminado», abre un período precongresual de claro enfrentamiento en el seno del PSOE murciano. La crítica del sector contestatario se basa en su oposición a la gestión del grupo socialista en las instituciones públicas.
