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Solidaridad insiste en la semana de cinco días para Polonia, mientras se suceden las huelgas

Las relaciones entre el sindicato libre polaco Solidaridad y las autoridades se encuentran en un punto muerto, que no solucionó la entrevista mantenida el pasado lunes entre Lech Walesa y el primer ministro, Jozef Pinkowski.

Las recientes huelgas por todo el país tendrán una continuación en los próximos días, en tanto no se solucione el tema de los sábados libres, reclamados por los obreros, que califican la decisión del Gobierno de no aceptar la semana de cinco días como una violación de los acuerdos de Gdansk, Szczecin y Jaztrebie, firmados el pasado verano.El sindicato MKZ de Gdansk, confederado a Solidaridad, mantiene la convocatoria para mañana de una huelga de advertencia de cuatro horas, de ocho a doce (hora de Madrid), en protesta por la negativa gubernamental a considerar no laborables todos los sábados, así como a permitir el acceso de Solidaridad a los medios de comunicación sin censura, negativa que es considerada una violación de los acuerdos del pasado verano.

De todas formas, la Comisión Nacional de Coordinación de Solidaridad, máximo órgano del sindicato, ofreció ayer conversaciones al Gobierno antes de quince días para solucionar la realización «insatisfactoria » de los acuerdos de Gdansk y acusó a las autoridades de una «campaña de desinformación» que ha conducido a una situación de enfrentamiento.

Huelga el sábado

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Asimismo, la Comisión Nacional de Coordinación de Solidaridad, máximo órgano del sindicato, declaró ayer, en su reunión semanal en Gdansk, que apoya incondicionalmente la defensa de la se mana de cinco días, y, en consecuencia, el paro que se efectúe el próximo día 24, declarado laborable por las autoridades.

En la única moción votada ayer se declaró festivo, unilateralmente, el día 24, a menos que las autoridades reconozcan oficialmente, antes de esta fecha, la aplicación de la semana de cinco días. A pesar de todo, los dirigentes de Solidaridad invitaron a sus miembros a trabajar algunos sábados para permitir mejoras económicas en el país.

El MKZ de Gdansk exige que los trabajadores que participen en la huelga de advertencia de mañana, que será extensible a todo el litoral báltico, no deben ser represaliados por las autoridades y se respetará su salario.

Las autoridades repitieron en los últimos días que todos los obreros que no acudiesen al trabajo los sábados fijados como laborables (uno de cada dos) perderían su salario y parte de la paga extra anual. Asimismo, se amenazó a los trabajadores que participaron el pasado viernes en la huelga de transportes públicos de Varsovia, convocada por Mazowsze, rama varsoviana de Solidaridad, con reivindicaciones similares a las planteadas por el MKZ de Gdansk.

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