El cine en TVE
Aparte de la emisión de telefilmes, producciones realizadas para su explotación exclusiva en televisión, y de los programas informativos, musicales y dramáticos de producción propia en vídeo u ocasionalmente en directo, TVE programa semanalmente un elevado número de películas, producciones hechas para su exhibición en locales cimatográficos y que Televisión alquila ocasionalmente para su emisión.En la actualidad se programan semanalmente seis películas. Tres en la primera cadena, dentro de los espacios Cine español, Primera sesión y Sábado cine, y tres en la segunda, en los espacios Cine-club, La clave y Filmoteca TV. Programas que suelen tener los índices más elevados de audiencia, especialmente los de los sábados por la noche. La clave, por el interés del coloquio, y Sábado cine por emitirse a última hora de la noche.
Salvo algún hecho aislado, como puede ser la programación hace unos meses en Cine club de un ciclo bastante completo dedicado al coreógrafo y director norteamericano Busby Berkley, la programación de películas en TVE es desde hace tiempo de una gran mediocridad, rozando la total deficiencia. Se compone de un 80% de producciones norteamericanas de segunda fila o de producciones emitidas anteriormente por TVE en el caso de tener un mayor interés, más un 20%, donde se incluyen las películas españolas que integran el espacio Cine español, y de algún otro, y desconocidas producciones provenientes de los países del Este.
Por ejemplo, para la próxima semana, del 30 de julio al 5 de agosto, están programadas las siguientes películas. La vida por delante (Fernando Fernán-Gómez, 1957), que cuenta en tono de comedia realista las vicisitudes de una pareja de recién casados, interpretada por Analía Gadé y el propio Fernán-Gómez, para salir adelante en el difícil mundo español de la década de los cincuenta. Es una de las mejores películas de su autor, una obra clave dentro de la historia del cine español y la mejor de cuantas se anuncian para la semana. El pato llama a las siete y media (Rolf Thiele, 1968), una comedia alemana de intriga interpretada por Heinz Ruhmann que carece de todo atractivo. Látigo (Burt Kennedy, 1971), un western de segunda fila y sin interés. El rey y yo (Walter Lang, 1956), una comedia sentimental con algunos números musicales y la presencia de Yul Brynner y Deborah Kerr, que es la más floja de las versiones cinematrográficas de Ana y el rey de Siam. El cuarto poder (Richard Brooks, 1952), que tiene el atractivo de su tema, la competencia entre la prensa, y el de la actuación de Humprhrey Bogart y Ethel Barrymore. Por ser una de las primeras películas dirigidas por Brooks no alcanza la calidad de sus trabajos posteriores, aunque se trata de una producción interesante ya emitida por TVE. El cambio de las estrellas (Sandor Szonyi, 1977), una comedia sentimental húngara de director e intérpretes desconocidos.
En este como en otros muchos aspectos TVE atraviesa uno de los peores momentos de su historia mucho más si se tiene en cuenta que a principio de los años setenta, cuando José Fernández Cormenzana se encargaba de la programación, era no sólo buena, sino excelente, tanto por el interés de los títulos programados, como porque estaba estructurada en ciclos coherentes y convenientemente presentados.
