Descubierto un nuevo yacimiento de gas en el golfo de Cádiz
Otro yacimiento de gas natural ha sido descubierto por CAMPSA en el golfo de Cádiz, al sur de la ciudad de Huelva. Se trata de una capa de cincuenta metros de potencia (espesor), que puede suponer una reserva de 2.000 millones de metros cúbicos de gas, según manifestaron a EL PAÍS fuentes de la compañía.
La capa mencionada se encuentra a 1.500 metros de profundidad y se ha decidido continuar la perforación hasta los 2.500 metros, en busca de nuevos objetivos. Antes de que finalice el año se tiene previsto realizar otros cuatro o cinco sondeos y existen fundadas esperanzas de que los resultados a obtener supongan duplicar o incluso triplicar las reservas actuales.Los yacimientos que actualmente se están poniendo en explotación supondrán una reserva de 4.000 millones de metros cúbicos y precisarán una inversión aproximada de 7.000 millones de pesetas hasta el año 1982.
En la actualidad hay sin conceder permisos de explotación para dos grandes zonas situadas más al sur del yacimiento recientemente descubierto; estos permisos estaban en poder de la Empresa Nacional de Investigaciones de Petróleo, SA (ENIPSA) y de un consorcio de varias compañías extranjeras, que en ambos casos renunciaron a ellos. De nuevo han salido a concurso y los dos mejores proyectos que se han presentado corresponden al monopolio CAMPSA y a Exxon, la primera compañía mundial de este sector. La opción es conjunta para las dos explotaciones y en ambos proyectos se prevé ya una inversión superior a los mil millones de pesetas sólo en el capítulo de sondeos. El concurso será resuelto por la Administración en las próximas semanas.
Hasta ahora, todos los yacimientos de gas natural descubiertos en el golfo de Cádiz son pequeños, pero, según las fuentes de CAMPSA, «van acumulando reservas y hacen pensar cada vez con más fundamento en posibles hallazgos de mayor importancia».
Las primeras evidencias de gas en la zona surgieron en los resultados de los sondeos preliminares, denominados Golfo de Cádiz B-2 y B-3, que se realizaron en octubre de 1978, aunque no arrojaron, sin embargo, un saldo positivo de rentabilidad. Los tres sondeos posteriores, a treinta kilómetros de la costa de Huelva, encontraron gas a profundidades comprendidas entre 1.200 y 1.700 metros, con un caudal estimado de cuatro millones de metros cúbicos por día, lo que supone algo más de 1,2 millones de toneladas equivalentes de petróleo al año.
Los resultados obtenidos hasta ahora hacen concebir esperanzas sobre un despegue español en el campo de los hidrocarburos, pero tanto en el caso de Cádiz tomo en el de Sabiñánigo (Huesca) las autoridades se muestran muy cautelosas. «Por el momento», manifestaba recientemente el comisario para la Energía, Luis Magaña, «estos yacimientos están en fase de exploración y no se podrá prescindir de las importaciones si se quiere adquirir un ritmo de crecimiento de su utilización que pueda triplicar en seis años el consumo actual en España.»
El empleo de gas natural es fundamentalmente aconsejable por su pequeño poder contaminante y su bajo precio, razones que le hacen deseable para el consumo residencial como sustitutivo del fuel-oil.
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