La comercialización del Mundial-82 se eleva a más de 1.200 millones de pesetas
La comercialización del Campeonato del Mundo de 1982 se elevará a treinta millones de francos suizos -unos 1.200 millones de pesetas-, según el contrato que se firmó el domingo en Zurich entre la empresa multinacional publicitaria West Nally y el Comité Organizador del Mundial-82. Esta cifra supone una cantidad siete veces superior a la que se ingresó por ese mismo concepto en Argentina.
Esos 1.200 millones de pesetas, que son seguros, pueden incrementarse en algunos más si la comercialización del Mundial-82 produce beneficios. Saporta, como buen negociante, ha conseguido en ese caso el 50% de los beneficios. Todas estas cantidades se distribuirán proporcionalmente entre la FIFA -10%-, España, como país organizador -25%-, y países participantes -65%-. España aún puede incrementar sus ingresos. Saporta consiguió que West Nally, la empresa que explotará comercialmente el Mundial-82, formará una filial en territorio español, que, en colaboración con el Comité Organizador del Campeonato, trabajará exclusivamente en España. El personal de esta filial será totalmente español. Los beneficios que en este sentido se obtengan en España se repartirán a partes iguales entre la empresa filial de West Nally y el Comité Organizador, sin ninguna otra distribución. Dentro de algunos días se elaborará el funcionamiento de esta empresa filial.Este contrato de comerciaflzación del Mundial-82 supone el tercero y último relacionado con los ingresosdel Campeonato y que serán distribuidos entre la FIFA, España y los países participantes. Anteriormente, se firmaron los derechos de televisión de los partidos -unos 1.600 millones de pesetas- y la publicidad estática de los campos de juego -cerca de 1.500 millones de pesetas-. Esto quiere decir que España tiene ya asegurados unos ingresos superiores a los 1.000 millones de pesetas, al corresponderle la cuarta parte del total de los ingresos por esos conceptos. A España aún le resta un cuarto capítulo de ingresos: el porcentaje que le corresponda como país participante y de las recaudaciones de los encuentros y lo que se obtenga con la venta de monedas conmemorativas, lotería especial y otras actividades.
