_
_
_
_
_

El asesinato del gobernador militar de Madrid forma parte de un plan de provocación al Ejército

El asesinato del gobernador militar, de Madrid, Constantino Ortín, cometido ayer tarde a la puerta de su domicilio por un comando terrorista, forma parte de un plan de ETA militar para provocar a las Fuerzas Armadas, según se desprende de los propios comunicados de la organización terrorista. ETA reivindicó ayer también los asesinatos de¡ comandante ayudante del gobernador militar de Guipúzcoa y del cabo artificiero de la Policía Armada de Pamplona. Unos 4.000 policías iniciaron durante toda la jornada una espectacular operación de caza y captura de los asesinos, estableciendo numerosos controles en el casco urbano de la capital y carreteras de salida, que colapsaron el tráfico de la ciudad.

Más información
Las luces de la provocación

La noticia del asesinato del general Ortín fue conocida inmediatamente por el ministro del Interior, quien se encontraba reunido con el vicepresidente del Gobierno y ministro de Defensa y con el director general de Seguridad para examinar, precisamente, las medidas a adoptar ante el comunicado hecho público por ETA militar el pasado martes anunciando una nueva serie de antentados contra jerarquías castrenses.El señor Martín Villa informó al presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, y éste, a su vez, al Rey. El ministro del Interior, tras mantener una urgente reunión con sus más inmediatos colaboradores, se dirigió al palacio de la Moncloa, al igual que el teniente general Gutiérrez Mellado. El ministro de Defensa abandonó la sede de la Presidencia del Gobierno pasadas las siete de la tarde.

A las ocho se reunió la Junta de Jefes de Estado Mayor, presidida por el teniente general Ignacio Alfaro Arregui e integrada por el teniente general Tomás de Liniers y Pidal, el almirante Luis Arévalo Pelluz y el teniente general Emiliano Alfaro Arregui.

Prácticamente la totalidad de los partidos políticos y centrales sindicales han hecho públicos comunicados de condena. El presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV) señaló que este nuevo asesinato forma parte de una estrategia insensata y que pretende forzar una acción militar sobre Euskadi. El gobernador civil de Guipúzcoa, por su parte, estima que las últimas acciones de ETA militar intentan implicar al Ejército como institución, ya que «están perdiendo terreno, no les sigue el pueblo y se encuentran en una situación desesperada tras las últimas detenciones».

Aunque se advierte inquietud en medios militares, durante la jornada de ayer se mantuvo una completa calma. Banderas nacionales y crespones negros aparecieron en las fachadas de varias casas de militares. Se tiene noticia de un pequeño incidente protagonizado por un comandante en la clínica Francisco Franco, donde fue trasladado el general Ortín tras el atentado.

Pasada la medianoche, el ministro del Interior, señor Martín Villa, compareció ante las cámaras de RTVE para anunciar que el Gobierno no piensa conceder ninguna amnistía ni negociar con ETA, y expresó su convicción de que las medidas legales en vigor son más eficaces para la lucha antiterrorista que los antiguos estados de excepción.

Por otra parte, dos artefactos explosivos de escasa potencia hicieron explosión anoche, con un intervalo de veinte minutos, en dos estaciones del ferrocarril Metropolitano de Madrid (Prosperidad y Estrecho), sin que en ninguna de ellas se produjeran víctimas.

Páginas, 8,9, 10 y 11

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_