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Algo huele a podrido

«A falta de una responsable información oficial sobre el tema, es la prensa quien día a día descubre los recónditos entresíjos del tráfico de armas en que se ven envueltas algunas empresas de nuestro país. Hace ya once días lue el Allul fue interceptado por las autoridades británicas y desde entonces nuestra única seguridad ha sido el dragaminas Nalón, que le ha seguido en su arribada bilbaína y en su singladura por la costa cantábrica hasta enfilar el Atlántico.Sólo el Ministerio de Defensa ha infórmajo brevemente de la apertura de una investigación. Pero el Parlamento no ha dado señales de vida. Nos atreveríamos a decir que tampoco el país se muestra muy afectado por el descubrimiento de 3.000 fusiles en las bodegas de un carguero con destino al País Vasco. Nadie parece impresionado por que algunos miembros de la tripulación declaren en Bilbao que en su opinión las armas siguen a bordo. Ni nadie desmiente que hubiese otro contenedor con dos tanquetas, justificadas como "material musical".

"Estamos estudiando el problema", decía el miércoles en estas páginas Enrique Múgica, pero de sus palabras no parece deducirse ninguna urgencia en su comisión parlamentaría. Y, sin embargo, la Cámara es el campo más apropiado para abrir una investigación a fondo que sea realmente pública. No falta quien quiere una rápida desdramatización: se trata de un caso de espionaje industrial y competencia desleal, se ha dicho.

Y, sin embargo, un estudio de las últimas rutas del Allul a lo largo de 1978 nos lleva a una serie de puertos comunes: Rotterdam, Amberes, Rochester, Bilbao, Vigo, Lisboa, Durban (Africa del Sur) y Porth Elizabeth (Africa del Sur). De vez en cuando se consigna tam bién una escala en Zeebrudge, pero las armas de la fábrica de Herstal pueden ser embarcadas en cual quier puerto de la zona, de hecho hay un ferrocarril directo desde Rotterdam, por ejemplo. El que los británicos hayan parado precisa mente este cargo no quiere decir necesariamente que sea el único, sino más bien que al tratarse de un arma utilizada Po ron temer su desembarco en Rochester.

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No se trató, por otra parte, como se creía en un principio, de un "soplo" a la policía británica, sino de una información poco menos que oficial. La venta de armas en Bélgica se llevó con seriedad y los documentos del Allul afectan nada menos que a cinco departamentos aubernamentales. Pretender que el gabinete británico tenga que enterarse por algún espía es buscarle seis pies al gato. De la misma forma no hay que entrar en ningún círculo secreto para imaginar que las autoridades españolas tienen medios suficientes para saber a estas alturas toda la verdad sobre los periplos del Allul, los cargueros de la García Miñaur, SA, y los negocios de los Barreiros en tan oscuro tráfico.

Lo que roza los límites de lo incomprensible es por qué estas informaciones no se han hecho ya públicas, caiga quien caiga. Estamos hartos de la política de hechos consumados. Nos encontramos ante la inmensa paradoja de ser un pais que en la ONU da la imagen de no alineado, que juega un papel importante en la conferencia de Belgrado, que no'partícipa ciertamente en la carrera de armamentos. y que, sin embargo, se ve envuelto en las más curiosas situaciones. Si el conflicto de Beagle se endureciera, resulta que los chilenos tienen aviones norteamericanos vendidos por España en pleno bloqueo estadounidense a aquel país, el sha reprime a su pueblo con armamento comprado aquí y Somoza ídem (...).»

7 octubre

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