Consumada la unidad socialista en el País Valenciano
Sin la presencia de los líderes socialistas anunciados -Felipe González y Enrique Tierno- el pasado domingo se consumó la unidad de los socialistas valencianos bajo las siglas del Partido Socialista del País Valenciano-PSOE, que resultan de la convergencia iniciada desde el 15 de junio entre los socialistas nacionalistas y las dos grandes formaciones de ámbito estatal, PSOE y PSP. Primero se integró en el PSOE una escisión del PSPV encabezada por Joan y Vicent Garcés y, posteriormente, mientras llevaron las negociaciones el PSOE y PSPV en el marco del «documento de Alicante», el PSP se unificó con el PSOE. Tras este proceso los socialistas valencianos se consolidan como primera fuerza electoral.
El nuevo partido se declara con un programa y acción encaminados a superar el modo de producción capitalista, mediante la toma del poder político y económico y la socialización de los medios de producción. Reafirma su carácter de organización de clase, por tanto de masas, marxista y democrática, identificada con la personalidad valenciana. También reafirma más específicamente el papel del marxismo como teoría política de interpretación de la historia, pero sin entenderlo como una doctrina fija e inmutable sino como un cúmulo de conocimientos verificados creadores.José Luis Albiñana manifesto que no se encontraba allí como presidente del consejo sino como miembro de la ejecutiva federal del PSOE. «El único presidente del Consell aquí es el nuevo partido.» Después de subrayar la inexistencia de un contencioso de siglas para culminar la unidad socialista con una organización que transformará la sociedad además de ganar las elecciones, el socialista Albiñana expresó que la autonomía valenciana está llamada a ser de primera clase porque tiene de primer partido al socialista.
Mientras Alfonso Cuco, secretario general del PSPV, acusó a la dictadura de única responsable de la división socialista y destacó la República federal como punto de llegada política para el nuevo partido, la socialista catalana Marta Mata obtuvo grandes aplausos al subrayar la hermandad de Cataluña y el País Valenciano por razones de lengua e historia.
Por su parte, Enrique Barón, de la Federación Socialista Madrileña, señaló que la unidad socialista consolida su fuerza mayoritaria en cada nacionalidad, crea una alternativa a la reforma de UCD para preparar el próximo paso: «ser mayoritarios en el Gobierno del Estado».
