Socías pide el retorno de la Generalidad
El alcalde de Barcelona, José María Socías, consiguió ayer que la Corporación Municipal, donde predominan los concejales inmovilistas, aprobase de hecho una solicitud del propio alcalde, en la que se requería apoyo para lograr el retorno de la Generalidad de Cataluña y de las demás instituciones catalanas, precisamente suprimidas por un decreto del general Franco, firmado hace hoy exactamente 39 años, el 5 de abril de 1938.
Ello se produjo con motivo de la celebración de una sesión extraordinaria y otra ordinaria del pleno municipal de Barcelona. La finalidad de la primera era aprobar los presupuestos. En su inicio, y sin que fuese una moción en el sentido formal, el alcalde requirió el apoyo de la Corporación que preside para solicitar «lo que ya pedí al presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, en ocasión de su última visita a Barcelona».Con mucho tacto, debido al carácter inmovilista de la mayoría de concejales, el señor Socías dijo textualmente en lengua catalana: «Considero imprescindible el retorno de las instituciones que promovieron grandeza para nuestras tierras y que tanto contribuyeron al mundo de las letras y del trabajo.»
Más adelante, y tras recordar nuevamente que ya había hecho estas afirmaciones ante Adolfo Suárez, añadió: «Esto pasa por el retorno de la Generalidad, del Parlamento, y de las instituciones, señeras de Cataluña y necesariamente por el estatuto.»
Pidió apoyo para que «se promuevan todas aquellas normas que posibiliten que el estatuto llegue a ser un hecho en nuestras tierras. Por ello pedimos que aquello que en su día hicimos llegar al presidente del Gobierno sea apoyado por esta Corporación, como una forma de posición clara ante la ciudad y la expresión también clara de lo que quieren los ciudadanos de Barcelona en estos momentos trascendentales de nuestra vida política y social».
Abandonos
Tras el parlamento de José María Socías, apoyado explícitamente por Eduardo Tarragona, algunos concejales abandonaron la sala. El que fuera teniente de alcalde con Joaquín Viola, Jaime Abella de Castro, se encontró repentinamente indispuesto y tuvo que dirigirse a su casa.
Al ser aprobada la moción al inicio de la sesión ordinaria que siguió a la extraordinaria, es posible hacer valer la aprobación formal de la solicitud del alcalde Socías.
