Los carlistas acusan a Sixto de Borbón de maniobras de división
«Este tema forma parte de una campaña contra el Partido Carlista instigada por Sixto de Borbón y Oriol que en su momento quedará claro. No quiero adelantarme al comunicado de la familia de don Javier ni de mi partido. Lo que sí creo es que hay fuerzas importantes que quieren lograr la división en el carlismo.»
Estas palabras de Carlos Carnícero, del comité central del Partido Carlista reflejan exactamente la reacción y la impresión que se tiene en el seno del Partido Carlista, en torno a la información literaria y gráfica publicada por la revista Actualidad Española, en la cual aparecen juntos en una fotografía don Sixto de Borbón y Parma y su padre don Javier. El redactor da a entender en su información que el principal protagonista de los hechos de Montejurra está mucho más cerca de sus padres, que de. Carlos Hugo, del que se apunta parece estar marginado de su familia.«Esta información la ha complicado la agencia Cifra -añade Carlos Carnicero-, que al reproducirla añadió que Sixto hizo delante de su padre don Javier una serie de declaraciones en torno a Montejurra, en las que daba a entender que los seguidores de Carlos Hugo le habían provocado a él. Esto es absolutamente falso. La entrevista se realizó al día siguiente del reportaje fotográfiéo.»
El hecho de que don Javier aceptara poSar para las revistas gráficas en compañía de su hijo ha chocado en los ambientes carlistas, máxime cuando se sabe de disgusto que supone para el padre que fuera su propio hijo uno de los responsables de los hechos sangrientos acaecidos en Montejurra.
«Desconozco con detalle lo que de verdad o falso tiene la información -afirma por su parte Mariano Zufia, del comité central del Partido Carlista-. A mí me cuesta creer que don Javier, por decisión propia, se prestara a esejuego, máxime cuando aún recuerdo sus palabras en Arbonne (Francia) expulsando de la familia y del carlismo a su hijo Sixto. Por los datos que tengo, todo hace pensar que alguien llevó al padre engañado a casa de su hija Francisca, apartada totalmente de la vida política y del carlismo. En casa de Francisca apareció Sixto que, con todo el plan preparado, se fotografió con su padre. Las declaraciones realizadas posteriormente por Sixto no fueron hechas en presencia de don Javier, que no tiene nada que ver, políticamente hablando, con su hijo. Don Javier sufre de una profunda sordera y todo hace pensar que se trate de un plan de Sixto.»
Al igual que Carlos Carnicero, Mariano Zufía opina que se trata de una maniobra de Sixto de Borbón encaminada a desunir y desprestigiar al Partido Carlista y enrarecer el ambiente de cara al Montejurra de este año.
En cuanto al tema del regreso de Carlos Hugo a España, parece que el Partido Carlista quiere por el momento agotar las vías legales.
«Trataremos de agotar la vía administrativa, las gestiones, la legalidad para lograr nuestra decisión de ver a Carlos Hugo en España -señala Mariano Zufía-. Nosotros tenemos esperanza de que esté aquí antes del Montejurra de este año. En los contactos lleva dos a cabo hasta el momento, no se han recibido portazos pero sí silencio. Tenemos el convencimiento de que el freno está en las máximas alturas.»
El problema principal radica, en opinión de Mariano Zufía, en que por el momento no se reconoce a Carlos Hugo como español, siendo nacido en el seno de una familia en el exilio.
