Europa, prioritaria para el presidente venezolano
La posibilidad de que no sólo Venezuela, sino también otros países del continente participen de lazos más estrechos con países europeos, producirá en Latinoamérica mayor poder negociador cara a un nuevo orden económico.
En lo que obviamente debe ser interpretado como un signo de orientación europeísta de la apertura venezolana, el presidente Pérez no se interesó en una entrevista con el presidente norteamericano, sin embargo, dio la mayor importancia a sus visitas a Italia, Gran Bretaña y la Unión Soviética.
En Italia, Venezuela ha buscado tecnología y empresas conjuntas, y ha entablado negociaciones para la inmigración de mano de obra -se prevé que 275.000 personas vengan a Venezuela-.
La visita al Vaticano, para un presidente cuyo principal partido opositor es democristiano, resulta un espaldarazo para su campaña en favor de un nuevo orden social internacional.
Tanto en Italia como en Gran Bretaña, el jefe de Estado venezolano hizo hincapié en su propósito de hacer préstamos considerables.
En la Unión Soviética, el mandatario venezolano destacó su respeto por el pluralismo ideológico y consiguió apoyo para su gestión en apoyo del Tercer Mundo.
La participación en Ginebra en la reunión socialdemócrata, y su viaje a Madrid y Lisboa -escasos días después que el premier español-, ponen de manifiesto la ofensiva europea emprendida por Caracas.
