Polémica por la elección de San Sebastián en lugar de Vigo como una de las sedes del Mundial 2030
La RFEF asegura que está recopilando toda la documentación para que tanto la ciudad gallega como Valencia puedan ser incluidas como sedes por la FIFA, a quien el CSD ya envió una carta el pasado julio


La elección de las sedes del Mundial 2030 que España organizará junto a Marruecos y Portugal vuelve a estar en entredicho. La FIFA aprobó el pasado mes de julio las nueve ciudades y los 11 estadios (Madrid y Barcelona cuenta con dos) que acogerán en territorio español partidos de la Copa del Mundo. Entre las candidatas que fueron cortadas por la Real Federación Española de Fútbol estaban las ciudades de Valencia y Vigo. Esta última estaba entre las elegidas 48 horas antes de que la RFEF enviara a la FIFA el 29 de junio la relación definitiva de las sedes de su candidatura. Según la documentación a la que ha tenido acceso El Mundo, los criterios de evaluación otorgaban a la ciudad gallega y a su estadio de Balaídos una puntuación total de 10,2004 por delante de San Sebastián y Anoeta (10,1226). Dos días después, San Sebastián fue la elegida como la undécima sede española al aumentar su baremación hasta 10,6026 al tenerse en cuenta, según la RFEF, que Anoeta apenas debía realizar obras de remodelación, lo que repercutía favorablemente en los criterios de sostenibilidad. El 19 de julio, la federación anunció las 11 sedes que serían presentadas a la FIFA en el Bid Book (libro de sedes) el 31 de julio.
Las sospechas de una presunta manipulación en la baremación final se sustentan en la duda de por qué, si ya se sabía que el estadio de la Real Sociedad no necesitaba apenas reformas, no se le otorgó desde un principio una puntuación más alta y esta se elevó en el último momento, lo que favoreció que San Sebastián rebasara a Vigo.
En unos audios publicados también por 'El Mundo' sobre esa reunión de trabajo del comité encargado de la candidatura de España para el Mundial, que integraron María Tato, Fernando Sanz y Jorge Mowinckel, se intuye, cuanto menos, cierto caos. En aquel encuentro celebrado el 25 de junio de 2024 se puede escuchar entre otros a María Tato, directora de la candidatura, hablar así de los polémicos criterios de evaluación: “Vamos allá. Vamos a meter valores en el Excel a ver qué nos queda. La primera prueba de las 800 que haremos hasta que nos cuadre con el resultado”, llegó a decir.
El descarte de Vigo como sede mundialista ya fue muy criticado en su momento por el consistorio gobernado por el socialista Abel Caballero, que habló de “oscurantismo” en el proceso de selección y señaló como culpable a Rafael Louzán, actual presidente de la RFEF y expresidente de la Diputación de Pontevedra y del Partido Popular en la provincia. Este lunes, en una entrevista concedida a Espejo Público, el edil vigués volvió a incidir en la batalla política: “Louzán era entonces vicepresidente de federación y fue el que recibió el texto en el que Vigo aparecía como sede del Mundial. ¿Quién lo cambió? ¿Con qué criterios? ¿Por qué se hizo?”. Caballero, que ha pedido la comparecencia pública de Louzán para dar explicaciones, abundó: “No sé si tiene que ver que Louzán presidía la Diputación de Pontevedra y la perdió por el resultado en Vigo. En todo caso, es claro que aquí hay una posición manifiesta contra esta ciudad. Y, por lo tanto, hoy mismo tiene que salir el presidente de la Federación a dar explicaciones”.
Desde la federación también se interpreta que la candidatura de Vigo estaba respaldada por el Gobierno de Pedro Sánchez. Entre los criterios a tener en cuenta, el Consejo Superior de Deportes quiso incluir el estratégico, no incluido por la FIFA, para defender que Vigo era frontera natural y estaba muy ligada a Portugal, país coorganizador, y a una de sus sedes, Oporto. Este criterio, de haberse aplicado, garantizaba a Vigo su condición de sede mundialista, pero no fue tenido en cuenta.
El 26 de julio, el presidente del Consejo Superior de Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, envió una carta a la FIFA a la que ha tenido acceso EL PAÍS en la que recalcaba que la decisión de no incluir a Vigo y a Valencia como sedes del Mundial 2030 era exclusiva de la federación. En la misiva, Rodríguez Uribes se dirige a Mattias Grafström, secretario general de la FIFA: “La Real Federación Española de Fútbol anunció hace pocos días la elección de nueve ciudades y once estadios como sedes nacionales, una decisión que fue tomada desde el ámbito federativo. La elección deja fuera de la organización de partidos de este gran campeonato (y, por tanto, de la distribución de sus beneficios económicos, sociales e incluso emocionales) a dos ciudades extraordinarias, Valencia y Vigo, cuyos clubes, históricos y señeros, militan en la máxima categoría de la Liga. Son dos ciudades, además, fundamentales para la vertebración territorial de nuestro país; la primera, Valencia, es una de las grandes capitales del Mediterráneo y la segunda, Vigo, está estrechamente vinculada con Portugal, en particular con la ciudad de Oporto”. El CSD asegura que apostó por presentar una candidatura de máximos, con 13 sedes, y que luego la FIFA descartara. Marruecos y Portugal se oponían a esto porque la FIFA recomienda un máximo de 20 sedes y solo se podían repartir siete entre ellas si España presentaba 13.
Ante el revuelo originado por ese cambio de puntuación de última hora, desde la federación defienden que en esta nueva etapa de la RFEF [la de Louzán], iniciada seis meses más tarde de la elección de las candidaturas, “se busca la máxima transparencia” y que en estos momentos se está recopilando toda la documentación para que tanto Valencia como Vigo puedan ser consideradas sedes por la FIFA. En referencia a la documentación a la que ha tenido acceso El Mundo, diversos correos y dos tablas de excel en la que se aprecia que Vigo fue seleccionada antes que San Sebastián, desde la federación afirman que, “según la información recabada por el momento, se realizaron al menos cinco documentos de baremaciones, considerados como borradores de trabajo no definitivos, que se fueron adaptando de acuerdo a los criterios de FIFA”. Por último, desde la RFEF dicen que “el Gobierno, a través de la llamada Comisión de supervisión y normalización del fútbol español” validó todo el proceso y que en los próximos días se darán a conocer conclusiones sobre cómo se eligieron las sedes.
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