La fecha para el regreso del Barcelona al Camp Nou continúa en el aire aunque el club defiende que el clásico se jugará ya en el nuevo estadio

El Barcelona insiste en que regresará al Camp Nou en mayo. Esto significa que el equipo dirigido por Hansi Flick disputaría en el barrio de Les Corts los últimos dos partidos de La Liga: el clásico frente al Real Madrid (11 de mayo) y el duelo contra el Villarreal (18 de mayo). Además, podría albergar la hipotética semifinal de la Champions League, cuya ida se jugaría entre el 29 y 30 de abril y la vuelta entre el 6 y 7 de mayo. ”Continuamos con el plan de regresar al Spotify Camp Nou después del partido frente al Mallorca”, aseguran desde los despachos del Barcelona.

Nada cambia en el Barcelona. O, al menos, nada ha cambiado desde que la entidad catalana anunció que prolongaría su exilio en Montjuïc hasta el 23 de abril, fecha en la que recibirán al Mallorca. El regreso al Camp Nou ha sido un tema tan recurrente como variable para la junta que preside Joan Laporta. La idea inicial era volver a jugar en el Camp Nou en noviembre de 2024, coincidiendo con los festejos del 125 aniversario del club. “Volveremos con el 70% del aforo seguro. Pero si no sucede, habrá consecuencias para Limak [la empresa constructora]. La más grave será una penalización de un millón de euros por día de retraso. Sin embargo, no ocurrirá. Trabajan a muy buen ritmo y siempre cumplen con los plazos de sus obras. Es uno de sus puntos fuertes”, aseguró Laporta en 2023. En la misma línea, Elena Fort, vicepresidenta social del club, afirmó: “Si no hay una pandemia o una catástrofe mundial, estaremos en el Camp Nou el 29 de noviembre de 2024″.

Sin embargo, llegó el 125 aniversario y el Barcelona continuaba en Montjuïc. “Hasta que termine la fase de grupos de la Champions no volveremos, pero estamos trabajando para garantizar las condiciones adecuadas”, señaló Laporta en diciembre. Mientras tanto, en el club aseguraban que el nuevo objetivo era regresar al barrio de Les Corts en febrero. Pero tampoco ocurrió. “Estaré contento cuando podamos volver. Esa es la situación por ahora”, ha declarado Hansi Flick, entrenador del Barcelona, antes de recibir al Atalanta en la última jornada de la fase de grupos de la Champions League este miércoles.

La realidad es que no hay una fecha concreta para la vuelta al Camp Nou, ni tampoco novedades sobre la supuesta penalización de Limak por los retrasos. Como si la situación no fuera ya suficientemente precaria, en enero surgió un nuevo inconveniente: la posible gira europea de los Rolling Stones, que comenzaría en mayo en Montjuïc. Un concierto que haría incompatible la preparación del evento con la presencia del equipo de Flick en el Estadio Olímpico Lluís Companys. “Por ahora, nadie nos ha confirmado el concierto de los Stones ni ningún otro en mayo. Tampoco hemos visto entradas a la venta. Lo que sí sabemos es que Guns N’ Roses tocarán aquí, pero será en junio”, explican desde las oficinas del Barcelona.

En el club hay quienes contemplan una posible mudanza a Londres si el Camp Nou no estuviera en condiciones de abrir sus puertas en mayo. “Hemos evaluado jugar el clásico en Wembley”, afirmaban la semana pasada desde la directiva. Sin embargo, este martes, tras una reunión de la junta azulgrana, esta opción parece haber perdido fuerza. La Federación, en cualquier caso, tampoco veía con buenos ojos esta alternativa. “Es una cuestión de tiempos”, explicaron. El protocolo para jugar el clásico en Wembley involucraría a varios actores. En primer lugar, el Real Madrid, cuyo visto bueno sería necesario antes de que la Federación, la UEFA y la FIFA aprobasen la mudanza a Londres.

El regreso al Camp Nou ya no es solo una cuestión de logística, sino también de dinero. Desde su traslado a Montjuïc, el Barça ha sufrido una merma de ingresos cercana a los 100 millones de euros por temporada. Por esta razón, Laporta y su equipo presupuestaron la vuelta al estadio para la presente campaña. Sin embargo, ese regreso sigue en el aire.