Munir decide un choque de estilos
El fútbol de posesión del Sevilla se impone al juego directo del West Ham
Buen partido del Sevilla, que se expresó como un equipo maduro y competitivo para tomar ventaja ante un buen rival como es el West Ham. El cuadro andaluz jugó un magnífico segundo tiempo, en el que dominó el partido a su antojo e incluso pudo conseguir una mayor renta para la vuelta en Londres la próxima semana. Un periodo en que el Sevilla se adelantó con un perfecto gol de Munir tras jugada de estrategia y en el que jugó como un equipo grande, pues solo pasó apuros en una ocasión que salvó Navas ante Lanzini para disponer de cuatro opciones claras de conseguir el segundo gol. Un triunfo muy meritorio del Sevilla, que se sobrepuso a las nueve bajas que sufre, incluida la de Rakitic en el calentamiento, para cuajar una buena actuación y tomar una buena ventaja para la vuelta. Un Sevilla que jugó como colectivo y en el que piezas como Navas, Koundé, Jordán Acuña y Corona fueron diferenciales dentro del buen tono general. En el primer tiempo, cuando hubo problemas, también surgió la figura de Bono para apuntalar a su equipo.
Fue muy bonito el choque de estilos que se vivió en Nervión. El Sevilla, angustiado por las bajas, jugó con un cariño enorme a la posesión de balón. Una sinfonía de pases que se debían traducir en peligro con los cambios de orientación de un atinado Jordán o las conducciones de Corona y Ocampos. Tenía enfrente el equipo andaluz a un West Ham al que no le importaba lo más mínimo la posesión. El sexto clasificado de la Premier es un conjunto intenso, con un delantero centro, Antonio, que parece un acorazado, y gente dinámica y rápida como Vlasic, Fornals y Lanzini. Este atractivo duelo de ideas futbolísticas se tradujo en claras ocasiones para ambos bandos. La primera fue del Sevilla, a los cuatro minutos, cuando un gran pase de Corona fue rematado fuera por Munir con todo a favor.
De estrategia
Mucho más clara fue la de Vlasic a los 11 minutos. Una jugada de estrategia acabó con un remate claro del delantero croata. Bono salvó los muebles y Antonio no acertó a rematar con todo a favor. Se salvó el equipo andaluz, de buen toque de balón, con paciencia para intentar desmenuzar un partido complicado. La tuvo de nuevo Munir y un poco más tarde En-Nesyri hacía lucirse a Areola. El West Ham siempre respondía. Amante del fútbol directo, un balón en largo fue amortiguado por Antonio para que Vlasic lanzara desde el borde del área. Nuevo paradón de Bono, salvador del Sevilla.
El equipo andaluz fue el dueño del partido en la segunda parte. El West Ham apenas tuvo respuestas, sometido al ritmo y el buen juego del Sevilla. Marcó Munir tras una gran jugada de estrategia y Ocampos dispuso luego de hasta tres claras opciones para hacer un segundo gol que hubiera supuesto una gran ventaja para la vuelta. No llegó, pero el Sevilla mostró su autoridad en la competición que domina con una gran segunda mitad. El West Ham, un buen equipo, se vio superado ante el oficio y la intensidad con la que jugó el conjunto andaluz. La personalidad de los hombres de Lopetegui aplacó el ímpetu del conjunto inglés, al que le faltó un punto de grandeza en un escenario complicado. El Sevilla, el rey de esta competición con sus seis títulos, quiere seguir adelante.
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