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El Vardar le da un revolcón antológico al Barça

El equipo macedonio que dirige el madrileño Roberto García Parrondo remonta siete goles en 20 minutos (27-29) y se medirá en la final al Veszprem

Robert Álvarez
Stoilov celebra el último gol de la semifinal ante el Barça.
Stoilov celebra el último gol de la semifinal ante el Barça. Martin Meissner (AP)

El Vardar macedonio, un equipo en fase de descomposición, con muchas deserciones al inicio de temporada y al que su mecenas ha dejado de pagar las últimas nóminas, engrandeció la epopeya en que se ha convertido su singladura en la Champions y eliminó al Barcelona gracias a una remontada antológica. El equipo macedonio superó un socavón de siete goles en los últimos 20 minutos. Del 22-15 al 27-29. Ni siquiera ese parcial de 5-14 puede retratar el enorme varapalo que significa para el Barcelona una derrota inasumible, en una competición que es su razón de ser. Porque era el referente, un equipo temible para cualquiera, incluso para un Vardar sobre el que flotaba un halo que se demostró totalmente engañoso.

BARCELONA, 27; VARDAR, 29

Barcelona Lassa: Pérez de Vargas (Möller), Aleix Gómez (9, 2p), Mem (3), Palmarsson (1), Fábregas (1), Duarte (2), Ariño (3) -siete inicial- Syprzak (1), Petrus (2), Víctor Tomás (2), Sorhaindo, Ilic (1), Entrerríos (2), Andersson y Dolenec.

Vardar Skopje: Milosavljev (Ghedbane); Cupic (3, 2p),
Shishkarev (1), Kristopans (10), Ferreira (4), Kalarash, Dibirov
(2) -siete inicial-; Karacic (5), Skube (1), Dissinger (2), Stoilov (1)
y Kiselev.

Árbitros: Zigmars Sondors (LET) y Renars Licis (LET). Excluyeron
a Entrerríos, Duarte, Palmarsson, Mem y expulsaron a Petrus (m.58, por el Barça. Por el Vardar excluyeron Kalarash, dos veces, y a Skube.

Final a Cuatro de la Liga de Campeones. Lanxess Arena de Colonia. 19.000 espectadores. El Vardar disputará la final este domingo (18.00) contra el Veszprem, que ganó al Kielce (30-33).

Casi todos daban al equipo macedonio por más que bien retribuido con su mera presencia en la Final Four, en su fascinante envoltura en el Lanxess Arena de Colonia. Y la inclusión de cuatro jugadores suyos en el equipo ideal de la Liga de Campeones, y la elección de Roberto García Parrondo como mejor entrenador, parecía ya su premio de fin de curso. A nadie extrañó que el Barcelona pasara el rodillo en una primera parte que ya concluyó con siete goles de diferencia (16-9). El equipo de Xavi Pascual volaba en dirección a su 14ª final en la máxima competición continental y se acercaba a su décimo título, una cifra utópica para cualquier otro.

Pero García Parrondo ordenó una presión defensiva adelantada de dos y hasta tres jugadores. La estrategia empezó a darle réditos al Vardar mediada la segunda parte. El Barcelona se atascó en ataque y quedó acomplejado ante el juego del letón Dainis Kristopans. El lateral derecho de 2,15 metros superó una y otra vez la defensa azulgrana y concluyó con 10 goles. A la que la ventaja disminuyó (25-21), el Barcelona empezó a temblar, con el recuerdo de la última vez que cayó en la Final Four, hace dos años. Entonces, el Vardar le cerró el paso a la final con un gol de Cindric a falta de tres segundos para la conclusión.

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El Barcelona, de otra forma, si cabe, todavía peor, volvió a tropezar en la misma piedra. Todo le salió mal, especialmente en los últimos diez minutos. Xavi Pascual cambió a Gonzalo Pérez de Vargas por Kevin Möller bajo palos. Sin resultado. Aleix Gómez, espléndido antes, envió fuera un penalti. Dika Mem fue excluido. Volvió Gonzalo bajo palos. Pero su equipo estaba ya en caída libre. El círculo se estrechaba. El Vardar se imponía en todos los sectores. Una falta de ataque de Fabregas permitió a Ferreira igualar a 26.

Instantes después, Petrus cometió una falta sobre Kristopans que los árbitros, tras revisar el vídeo, sancionaron con la roja directa. El Barcelona ya no era el equipo que ha arrasado durante toda una temporada en la que ganó los seis títulos por los que compitió y que sobrellevó con holgura la liguilla de la Champions y el cruce de cuartos ante el Nantes. Se estrelló de nuevo en Colonia, donde su afición recordó de manera inevitable, la pesadilla de Anfield en la Champions de fútbol. El Vardar fue el Liverpool. Su rival en la final será est domingo (18.00) el Veszprem húngaro de David Davis, que, con 11 goles del serbio Nenadic, venció al Kielce polaco de Talant Dujshebaev por 30-33.

Víctor Tomás: “Ha sido desastroso”

Víctor Tomás, el capitán que alzó la última Champions del Barcelona en 2015, revivió el varapalo de 2017 ante el Vardar, si cabe, corregido y aumentado. “Estoy muy caliente. Un equipo como el nuestro no puede desaprovechar una ventaja de siete goles. Debemos hacer autocrítica. No sé cuantos minutos hemos estado sin marcar. Nos hemos atascado con una defensa tan abierta como nos han planteado. Ha sido una segunda parte desastrosa”, afirmó. “Nos hemos centrado más en el arbitraje que en nuestros problemas y no hemos sabido reaccionar”.

Roberto García Parrondo, el técnico madrileño del Vardar, alabó a sus jugadores y lamentó los problemas físicos que arrastra su equipo y no poder preparar mejor la final ante el Veszprem, que dirige el catalán David Davis.

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Sobre la firma

Robert Álvarez
Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona, se incorporó a EL PAÍS en 1988. Anteriormente trabajó en La Hoja del Lunes, El Noticiero Universal y el diari Avui.

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