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Punto de garra del Sevilla ante un buen Villarreal

El conjunto andaluz iguala un 0-2 en contra después de fallar un penalti en una espectacular pelea por la zona europea

Muriel intenta irse de Jaume Costa.Foto: atlas | Vídeo: Raul Caro Cadenas (EFE)
Rafael Pineda

Precioso pleito en Nervión. La pelea por Europa deparó un excelente partido entre el Sevilla y el Villarreal. El conjunto andaluz tenía el encuentro perdido, pues caía por 0-2 y estaba en inferioridad numérica después de la rigurosa expulsión de Ben Yedder. El Sevilla pudo meterse en el choque cuando Nolito falló un penalti. En ese momento, sin embargo, el equipo de Montella tuvo un arranque de furia conmovedor. Superado durante más de 70 minutos por un buen Villarreal, fundido tras el choque de Liga de Campeones, el Sevilla demostró que nunca se rinde. Empató un partido que tenía perdido y se llevó un punto que le sabe a gloria y que deprime al Villarreal, que jugó con orden y cuajo.

El arrebato de fe del Sevilla, con N’Zonzi de delantero centro después de hacer un golazo desde fuera del área, se escapa a toda lógica. El análisis es complicado. Sin fuerzas, con un 0-2 por debajo y después de fallar un penalti (Asenjo estuvo fenomenal ante Nolito), el Sevilla encontró fuerzas donde no las tenía, dejando atónito a un Villarreal que sacó a Javi Fuego para amarrar el triunfo y se encontró con el empate. El punto quizás se deba considerar justo, pues aunque el Villarreal fue mejor en la primera mitad, el Sevilla se rehízo en la segunda y fue golpeado por las decisiones arbitrales en momentos puntuales del choque. El corazón del conjunto andaluz igualó el buen trabajo de los de Calleja.

El Sevilla no puede con los pantalones. Destrozado después de la batalla de Munich, sin apenas respiro físico y mental, tuvo que afrontar una cita importante por Europa con un grupo de jugadores cascados. Montella, consciente de que el partido ante el Villarreal era una final, apenas refrescó al once que jugó contra el Bayern. El italiano no confía en los recambios. De eso se aprovechó muy bien el Villarreal, que compitió de manera excelente, jugando un gran partido. Bien asentado en defensa a pesar de las bajas de Álvaro y Bonera, con Mario de central, los de Calleja supieron además desplegarse con peligro ante la lentitud de movimientos del centro del campo del Sevilla. N’Zonzi, Banega y Vázquez eran jugadores distintos a los del Allianz, sin capacidad de repliegue. En definitiva, estatuas ante los estupendos movimientos de los jugadores del Villarreal. Así, Cheryshev se plantó solo ante Soria a los 19 minutos, siendo detenido con un paradón del guardameta del equipo andaluz.

El Sevilla había dado muestras sobradas de que no podía con el planteamiento del Villarreal. Sus tímidas apuestas se perdían al borde del área rival, con un ritmo de juego demasiado lento. Sin desborde ni cambio de ritmo, el Sevilla estaba ahogado. Tanto, que una excelente jugada de su rival acabó en un bonito gol. Le faltó al Villarreal meterse con el balón dentro del área. Toque y toque dentro del área hasta que Samu Castillejo la puso al segundo palo, donde emergió Raba para marcar de cabeza. Un precioso tanto que hacía justicia a lo visto en un primer tiempo de dominio del Villarreal, superior a un Sevilla sin chispa que sí tuvo razón de quejarse en una jugada sobre Banega. Rodri le hizo penalti al argentino y el colegiado, sin embargo, mostró tarjeta amarilla a Banega.

El Sevilla salió mejor en la segunda parte. Adelantó líneas y comenzó a meter en su área al Villarreal. Sandro y Ben Yedder tuvieron dos opciones para empatar, hasta que llegó la primera de las acciones claves de un segundo acto frenético. El colegiado le perdonó la segunda amarilla a Cheryshev y acto seguido expulsó a Ben Yedder en la protesta. La primera amarilla fue rigurosa. La segunda, justa porque el francés le aplaudió en la cara. En un minuto, el delantero estaba en el vestuario. Con uno más, el Villarreal se hizo dueño del balón y marcó en una magnífica acción de contragolpe. Bacca se plantó ante Soria y le batió con clase. Quedaba un cuarto de hora. Entonces el choque se metió en medio de un huracán. Jaume Costa hizo penalti y vio la segunda amarilla. Con los equipos igualados, Nolito falló el penalti. No se detuvo el Sevilla, que apretó y apretó con la fe de los desesperados. Marcó Nolito. Luego N’Zonzi de un gran disparo. El Villarreal, atónito, se tuvo que conformar con un punto cuando tenía el choque ganado. El Sevilla, con orgullo, se llevó otro. Además, la igualada le sirve para estar por encima del Villarreal en caso de empate a puntos.

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