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El Barcelona se refresca ante el Valencia

El equipo azulgrana olvida su varapalo en Alemania y arrolla a un rival alicaído

Robert Álvarez
Pressey presiona a Green.
Pressey presiona a Green.Andreu Dalmau (EFE)

El Barcelona, especialmente aplicado, muy escamado por su varapalo del miércoles en Alemania, se refrescó ante un alicaído y desacertado Valencia. El Barcelona se encaramó sobre sus propias vacilaciones y también sobre la defensa del Valencia con siete triples en los siete primeros minutos de partido, con nota para Moerman, autor de tres de ellos. La aceleración azulgrana se mantuvo gracias al ritmo y el criterio que impusieron Heurtel y Pau Ribas.

Después de haber perdido una renta de 26 puntos en el primer cuarto ante el Bamberg, Sito Alonso y sus jugadores se mantenían en vilo. Cada error, que los hubo, como algunas faltas absurdas y fuera de guion de Séraphin y algunos ataques alocados más que acelerados, concitaba urgentes llamadas al orden. El Barcelona no se dejaba ir por más amplia que fuera la ventaja, de ocho puntos en el primer cuarto, de 18 ya en el descanso tras un triple de Pressey. El base estadounidense está ya muy señalado en el Palau y hasta sus aciertos son acogidos como un bálsamo para una afición más misericordiosa que otra cosa, en su caso.

VALENCIA, 89; BARCELONA, 71

Barcelona Lassa: Heurtel (8), Hanga (3), Sanders (8), Moerman (13), Séraphin (12) –equipo inicial-; Pau Ribas (11), Pressey (7), Oriola (14), Koponen (6) y Tomic (7).

Valencia Basket: Van Rossom (7), Green (10), San Emeterio (0), Sastre (7), Pleiss (13) –equipo inicial-; Will Thomas (10), Rudez (7), Dubljevic (6), Vives (8), Rafa Martínez (0) y Doornekamp (3).

Parciales: 24-18, 26-14, 21-24 y 18-15.

Árbitros: Belosevic (Serbia), Koromilas (Grecia) y Juras (Serbia).

Palau Blaugrana. 5.089 espectadores. Octava jornada de la Euroliga. El Barcelona y el Valencia tienen ahora el mismo balance: tres victorias y cinco derrotas.

El Valencia, tal vez todavía aturdido por su dolorosa derrota el miércoles ante el Milan tras dos prórrogas, deambuló por el Palau sin ánimo ni acierto. San Emeterio falló todos sus tiros, Green y Dubljevic apenas dieron señales de vida. Solo Will Thomas, Pleiss y Vives animaban el alicaído juego de su equipo. Rudez también lo hizo por momentos y contribuyó a un 0-8 que rebajó un tanto el correctivo, aunque Pressey volvió a anotar sobre la bocina del tercer cuarto.

Pau Ribas y Oriola pusieron la directa hacia el triunfo de su equipo, ya servido con un contraataque finalizado por Pressey con un mate (71-56). El base de Dallas necesitaba reivindicarse tras su escasa y desacertada actividad en los tres últimos partidos. Y como él, todo el equipo. Lo consiguieron ante un Valencia que tendrá el domingo una ocasión para redimirse ante el mismo rival y en el mismo escenario, pero en la Liga Endesa.

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Sobre la firma

Robert Álvarez
Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona, se incorporó a EL PAÍS en 1988. Anteriormente trabajó en La Hoja del Lunes, El Noticiero Universal y el diari Avui.

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