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De Sants, del Sevilla y delegado del City

Marc Boixasa trabajó de becario en el Barça y es uno de los fichajes de Txiki Begiristain para el equipo de trabajo de Guardiola

La decisión fue de Txiki Begiristain: “El delegado será Marc, lo subo del filial”. “Pues vale, lo que tú digas”, le dijo Guardiola. Y Marc Boixasa, (Barcelona, 29 años) se convirtió en el Carles Naval de Pep en el Manchester City. “Otro gran fichaje de Txiki” dice ahora el técnico, que resume: “Un fenómeno”. Su presencia solo ha generado un problema: el día que el cuerpo técnico desembarcó en The Academy, Loren Buenaventura, el preparador físico, se fue a por él. “Tú y yo nos vamos a llevar mal”, le dijo a modo de presentación. Le sobraban razones. Loren es bético de cuna; Boixasa lleva al Sevilla metido en el alma. Superado el susto, han convertido cada lunes en un cruce de bromas. De momento, ríe más el delegado del City que el preparador físico. Juntos llegaron ayer a Barcelona vestidos de azul.

Hijo de economista y enfermera, Boixasa estudió en los Jesuitas de Sarriá, y vivió en la calle Bruc hasta que a los 15 años se mudó a la calle Teodora Lamadrid. Por eso, suele presumir al decir que es del barrio de Sants. Licenciado en ADE y Gestión deportiva, tiene el Nivel 1 y 2 de entrenador nacional de fútbol, habla cuatro idiomas (español, catalán inglés y francés) y está estudiando portugués. En el verano de 2007 se pasó una temporada de becario en el Barcelona, donde se hizo íntimo de una máquina de fotocopias, y pasó los estíos del 2008 y del 2009 en Sevilla adscrito al departamento de fútbol del cuadro hispalense, colaborando en temas administrativos referentes a la LFP y la UEFA. Se impregnó de sevillismo y de sevillanía, así que no es raro escucharle decir que el sueño de su vida es vivir en Triana y dedicar su vida a trabajar para el Sevilla. Luego, antes de viajar a Inglaterra, ejerció de consultor externo para el Girona la temporada 2010-2011.

12 catalanes en el City

De los 700 empleados del City Football Group, sin contar deportistas, repartidos entre Manchester, Londres, Nueva York, Melbourne, Shanghái, Abu Dabi, Singapur y Tokio, 12 son catalanes. Dos trabajan en NY (Cristina Mora y Maria Correone); uno en Londres (Nuria Tarré); y además del cuerpo técnico de Guardiola, tres en Manchester: Boixasa, Anna Gil y Anna Pala. Y por supuesto, Ferrán Soriano, que descarta que alguno de ellos trabaje en el club por ser catalán, y considera que a pesar de ser un estereotipo, es cierto que los catalanes son trabajadores, abiertos a otras culturas y de lenguaje directo.

Ferrán Soriano le conoció en el departamento de mercadotecnia del club, en Londres, trabajando con Omar Barreda. Tardó un suspiro en llevárselo a Manchester y al cabo de unos meses, Marc supo de una vacante en el departamento logístico del fútbol base, y presentó sus credenciales. Txiki le abrió la puerta del filial y pasó a ejercer de delegado. Su capacidad de trabajo hizo el resto.

“Es un tipo al que le dejarías las llaves de tu casa un fin de semana, volverías y todo estaría en su sitio. Hasta ese punto te puedes fiar de él”, resume uno de los ayudantes de Guardiola al hablar del Naval del City. “Parece que nunca se pone nervioso, todo lo tiene bajo control y no se le pasa una” explican quienes han trabajado con él los últimos cuatro años en The Academy. “Es tímido, no habla por no molestar, pero siempre está”, explican en el club. “Es un crack, con mayúsculas”, resumen en los despachos más importantes de la entidad.

Responsable de todos los elementos operativos, logísticos y administrativos del primer equipo, además de los desplazamientos y de la gestión de documentación y diversos trámites burocráticos ante la Premier, la FA y la UEFA, Marc Boixasa, de Sants y del Sevilla, también vuelve a casa.

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