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Luis Enrique resignado a quedarse sin el 9 que pidió

El asturiano asegura que si no encuentran en el mercado lo que buscan se quedará con su "maravillosa" plantilla.

Luis Enrique, durante el pasado encuentro contra el Liverpool en Estocolmo.
Luis Enrique, durante el pasado encuentro contra el Liverpool en Estocolmo. Adam Holt (REUTERS)

Luis Enrique apareció ayer en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva, feliz y contento. Dijo que el  Joan Gamper siempre es especial y matizó que no solo lo será para los nuevos futbolistas, que tendrán minutos y ocasión de presentar credenciales ante su nueva afición. Para el entrenador, el primer partido en casa siempre tiene algo de emblemático y más en esta ocasión, cuando la 51 edición del Trofeo se enmarca en los actos conmemorativos del aniversario de la primera Copa de Europa. “Para los barcelonistas es un recuerdo especial. Yo no sé si la vi o no. Ya sabéis donde estaba hace 25 años, así que... Siguiente pregunta”, despachó el técnico asturiano, renegando, otra vez, de su pasado madridista.

La alegría de Luis Enrique remite al elenco del que dispone: “Es la mejor plantilla que he tenido en el Barcelona. Es maravillosa”, aseguró antes de asumir que sigue pensando en la necesidad de fichar a un 9 puro, como anunció al comenzar la pretemporada, pero admite que si no lo encuentran, tampoco pasa nada. “Si lo encontramos, si damos con lo que necesitamos o si encontramos algo que mejore lo que tenemos, iremos a por él y si no, seguiremos con la maravillosa plantilla que tengo, que es de auténtico lujo. Sobre el papel es la mejor de los tres años”, sostuvo el asturiano.

Para Luis Enrique todo pasa por la realidad del mercado, motivo por el que, por ejemplo, han incorporado a André Gomes. “Si tienes oportunidad de fichar gente joven y con talento, sería ridículo no hacerlo”, aseguró para desmarcarse de quienes piensan que el equipo tiene muchos centrocampistas. También descartó que el club busque un central: “Si aparece algo, bien, pero no es una prioridad”.

Luis Enrique, convencido de que Iniesta tiene razón al decir que con lo del año pasado no bastará este curso para volver a ganar —“¡sabias palabras!”, dijo— fue tajante al decir: “En el fútbol no existe el pasado. El crédito hay que renovarlo permanentemente. Pero uno ve la intensidad con la que trabaja el equipo y parece que no han ganado nada. Y esa es la mejor situación para un entrenador. Somos un equipo único que se ha reforzado de una manera brillante. Intentaremos estar a la altura de la exigencia”. Tras asegurar que esta tarde dará media hora a Bravo, Ter Stegen y Masip, confesó haber decidido quién jugará el primer partido de la Supercopa, el próximo domingo, en Sevilla. No lo dijo.

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