Lamine Diack dimite del Comité Olímpico Internacional
El organismo de Lausana ya había suspendido provisionalmente como miembro honorario del movimiento olímpico al expresidente de la IAAF
Lamine Diack ha sido miembro activo del COI desde 1999, cuando fue elegido presidente de la federación internacional de atletismo en sustitución del fallecido italiano Primo Nebiolo, hasta diciembre de 2013, cuando cumplió 80 años y debió pasar por edad a la reserva, que en el organismo organizador de los Juegos Olímpicos se llama “miembro honorario”. Al día siguiente de que el presidente del COI, Thomas Bach, en una decisión de urgencia, decidiera aceptar la recomendación de su comisión de ética y suspenderlo provisionalmente, Diack, por voluntad propia ha dimitido de su puesto, según anunció el COI en un comunicado. Previamente, la noche anterior, el dirigente senegalés, ya había abandonado sus funciones como presidente de la Fundación de la IAAF, el otro cargo honorífico que ocupa en una federación a la que ha conducido a la crisis más grave de su historia.
Todos los pasos los ha dado Diack, presidente de la IAAF hasta las elecciones de agosto, ganadas por su vicepresidente Sebastian Coe, después de que el juez anticorrupción de París, Renaud van Ruymbeke, le imputara por un delito de “corrupción pasiva y blanqueo de dinero”, acusado de embolsarse más de un millón de euros conseguidos extorsionando a atletas sospechosos de dopaje, en su mayoría rudos, y aceptando sobornos a cambio de tapar sus casos. Además, según han publicado algunos medios, a Diack, a su hijo Papa Massata, al extesorero de la IAAF y expresidente de la federación de atletismo rusa, Valentin Balajnichev, y el exdirector de la comisión antidopaje de la internacional Gabriel Dollé, también les ha expedientado la comisión de Ética de la IAAF. lamine Diack se encuentra en libertad provisional tras pagar una fianza de 500.000 euros.
Su entramado “criminal”, como lo calificó el juez Van Ruymbeke, salió a la luz gracias al trabajo de la comisión investigadora de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) presidida por Dick Pound, cuyo primer informe, publicado el lunes, tuvo las consecuencias de una bomba atómica sobre el atletismo ruso en particular y sobre la credibilidad del atletismo mundial en general. La parte de su investigación concerniente a la corrupción dentro de la IAAF solo se conocerá a finales de diciembre, cuando la Interpol haya entregado al juez francés el resultado de su propia investigación, conocida como Operación Augías.
Cesa el director del laboratorio de Moscú
En Moscú han empezado a rodar cabezas, símbolo de cambio y sumisión, a dos días de que el Consejo de la IAAF si suspende al atletismo ruso. Ayer se conoció el cese de Grigory Rodchenkov, el director del laboratorio antidopaje de Moscú, la instalación en la que se destruyeron 1.417 muestras sospechosas antes de la llegada de los inspectores de la AMA.
Para sustituirle, la AMA, que ha cerrado el laboratorio hasta que cambie su gestión, ha recomendado un técnico extranjero. Las muestras conservadas se repartirán por diferentes laboratorios. Así, las correspondientes a los recientes Mundiales de natación de Kazan se guardarán en el laboratorio antidopaje de Barcelona.
El presidente Vladimir Putin se reunirá en Sochi, mientras tanto, con su ministro de Deportes, Vitaly Mutkó, y con los presidentes de las federaciones deportivas. De la reunión saldrá una respuesta oficial al informe de la AMA que reflejaba la práctica del dopaje de Estado y una serie de medidas con las que se intentará que Sebastian Coe deje sin efecto la petición de suspensión expresada por Dick Pound, el responsable de la comisión de investigación del antidopaje mundial.
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