El Bayern abre brecha

Articulado en torno a Xabi Alonso, Robben y Lewandowski, a un cerebro y dos espadachines que dominan como pocos el noble arte de perforar las redes, el Bayern puso un poco más de tierra de por medio en su rutinario objetivo de alzar la corona de la Bundesliga otro año más. Vencieron los de Guardiola (4-0) ante un endeble Hannover 96 que por si no tuviera suficiente con tener un ogro enfrente le puso todas las facilidades para que este se diese un banquete y extendiera la brecha con el otro gran aspirante al título, el Borussia Dortmund. Desafinado, el equipo de Jürgen Klopp patinó en casa frente al Hamburgo (0-1) y avista ya a su rival desde la lejanía, a 10 puntos.

Con Xabi Alonso como lugarteniente, el Bayern se divirtió y exhibió todos los atributos que resumen a un adversario temible en Europa. El vasco sacó el librillo de estilo e interpretó a la perfección el juego; aceleró cuando había que acelerar, distribuyó el cuero con criterio y engrasó la sala de máquinas a la espera de desafíos mayores. Incluso removió entre su particular baúl de los recuerdos, allí donde descansan lecciones magistrales y disparos teleféricos, como aquel que endosó al Newcastle desde el centro del campo cuando vestía la camiseta red del Liverpool. Inspirado, se atrevió con otro chut desde 55 metros, pero en esta ocasión la manopla de Zieler le privó del premio. 

El Marsella de Bielsa venció en Caen y suma ya siete triunfos consecutivos; el City aprieta al Chelsea en Inglaterra

Volvió a apostar Guardiola por una línea de tres defensas (Benatia, Dante y Alaba) y dos carrileros profundos (Rafinha y Bernat). Lahm, otro futbolista cerebral, enhebró con Alonso en el centro del campo y en al ataque brillaron una vez más Robben y Lewandowski. El ariete, un estilete perfecto para la máquina muniquesa, firmó dos dianas prácticamente calcadas. Una nació desde la derecha, con un hermoso desplazamiento de Rafinha que el punta polaco acomodó y envió con tino hacia las mallas. La segunda tuvo origen en la derecha, desde donde el menudo Shaqiri dibujó otro pase milimétrico que su compañero no desperdició. Robben, envidioso él, también quiso ganarse los focos y se apuntó un doblete con una esprint de los suyos y un zurdazo seco.

En Inglaterra, el Aston Villa exigió hasta el final al Manchester City (0-2), que no abrió el marcador hasta el minuto 81. Achucha el equipo de Pellegrini al líder, el Chelsea de Mourinho, que este domingo disputa el derbi londinense contra el Arsenal (15.05, Canal+ Fútbol) con Cesc, excapitán gunner, en la óptica de todas las miradas. Antes, los de Manuel Pellegrini vencieron con dos punzadas de Yaya Touré y Agüero, mientras el Liverpool enderezó el rumbo -sumaba tres jornadas sin conocer la victoria- al deshacerse en Anfield del West Bromwich Albion (2-1). Lallana y Henderson fueron los goleadores porque el encargado de esa tarea, en teoría, estaba en el banquillo. Fichado a bombo y platillo este verano (el club inglés pagó 20 millones de euros al Milan), el italiano Balotelli presenció casi todo el encuentro desde el banquillo; sólo jugó 26 minutos. En seis encuentros de la Premier aún no ha marcado y las críticas contra él arrecian.

Todo lo contrario ocurre con el Olympique de Marsella diseñado por Marcelo Bielsa. El equipo dirigido por el técnico argentino doblegó al Caen (1-2, goles de Romao y Gignac, máximo realizador del torneo con nueve dianas) y engrosó su casillero de victorias consecutivas. Desde que tropezase contra el Bastia y el Montepellier en las dos primeras citas de la Ligue 1 ha enlazado siete triunfos seguidos y ha generado un gran impacto en el fútbol francés con su presión y estilo ofensivo.