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POLÍTICA DEPORTIVA

Federaciones en juego

El Consejo Superior de Deportes recorta un 21,7% las subvenciones a estas organizaciones

Amaya Iríbar
Miguel Cardenal (izquierda) junto a Alejandro Blanco.
Miguel Cardenal (izquierda) junto a Alejandro Blanco.Emilio Naranjo (EFE)

El dinero de las quinielas es clave en el presupuesto del Consejo Superior de Deportes recién aprobado, y que asciende a 192,7 millones de euros. Si se quitan los 63 millones de estas apuestas destinados al mundo del fútbol, que por primera vez, y gracias a la nueva ley del juego, gestiona el organismo, y los 5,2 millones con los que se financia la Agencia Estatal Antidopaje, el recorte es del 24,46% con respecto al año anterior, lo que ha puesto en alerta a varias federaciones, que dependen de ese dinero público para sobrevivir.

“Este no es el presupuesto que queremos”, ha reconocido hoy el secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, en la presentación del presupuesto de su departamento. Cardenal ha subrayado las dos líneas que marcan este esfuerzo: “Austeridad máxima, que es lo que exige la situación de España” y “salvaguardar el corazón de la actividad deportiva”.

Esto se traduce en un auténtico hachazo a la subvención que reciben las distintas federaciones. El recorte medio es del 21,7%, lo que deja la aportación directa a estos organismos en algo más de 48 millones de euros.

Las federaciones ya han cobrado alrededor del 30% de ese dinero como anticipo y ahora esperan, algunas con ansiedad pues atraviesan una difícil situación económica, la decisión del reparto final. Cardenal, que ya se ha reunido o ha tenido un primer contacto con la mayoría de los presidentes de federaciones deportivas, asegura que estos “son conscientes de que deben recortar gastos” y “ya saben, más o menos, por dónde van a ir las cosas”.

Más bien lo temen. Con la crisis económica, los patrocinadores escasean y algunos de los que aún apuestan por el sector han reducido sus inversiones.

Una vía para suavizar el batacazo puede ser la ley del juego, aprobada el año pasado deja en manos del CSD la gestión del dinero de las quinielas que se reinvierte en el deporte. Hoy el 10% de la recaudación, que lleva años a la baja, es para la Liga de Fútbol Profesional (LFP), que debe destinarlo en su mayoría a cumplir con el plan de saneamiento y garantizar la seguridad de los estadios, y otro 1% lo recibe la Federación Española para promocionar el deporte aficionado. Pero el proyecto de ley de presupuestos, en una de sus disposiciones finales, da al presidente del CSD, o sea a Cardenal, el poder de “determinar las entidades beneficiarias de esas asignaciones y los porcentajes”.

Este punto está aún en estudio, pero tal vez las federaciones más modestas puedan ver algo de luz en las palabras de Cardenal: “es una fórmula muy abierta y ofrece muchas opciones. Está en fase de estudio, pero creo que el criterio que debe regir es el criterio de solidaridad”.

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Sobre la firma

Amaya Iríbar
Redactora jefa de Fin de Semana desde 2017. Antes estuvo al frente de la sección de Deportes y fue redactora de Sociedad y de Negocios. Está especializada en gimnasia y ha cubierto para EL PAÍS dos Juegos Olímpicos y varios europeos y mundiales de atletismo. Es licenciada en Ciencias Políticas y tiene el Máster de periodismo de EL PAÍS.

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