Bolonia da la bienvenida a Rossi

El equipo Ducati se viste de largo en Bolonia. Y lo hace con el aliciente de recibir al nueve veces campeón del mundo Valentino Rossi, el gran protagonista de esta jornada festiva de hoy en la ciudad en la que está instalada la fábrica italiana. El de Tavullia y su compañero de equipo, el estadounidense Nicky Hayden, han llegado esta tarde a las instalaciones de la empresa, donde han sido recibidos por el consejero delegado de Ducati Corse, Gabrielle del Torchio, y la cúpula directiva, además de otras autoridades de Bolonia.

Lo primero que han hecho, ha sido visitar el museo, donde Rossi ha descubierto, con cierto jolgorio, el célebre Siluro, ganador de, precisamente, 46 récords de velocidad en la década de los 50. Los dos pilotos han conocido a los directivos y presidentes de las principales delegaciones de toda Europa, que les han deseado suerte y, de paso, han aprovechado para tomar algunas fotos y solicitar autógrafos. Más que una fábrica, Borno Panigale parecía la convención de un club de fans de Ducati y, sobre todo, de Valentino Rossi.

El siguiente paso es la visita a Piazza Maggiore, en el centro de Bolonia, junto a la Desmosedici GP11, la moto con la que correrán esta temporada, y donde celebrarán el fin de fiesta ante centenares de aficionados. La primera carrera es el próximo 20 de marzo en Qatar y todavía queda mucho trabajo por hacer tras unos resultados más que discretos en los dos entrenamientos oficiales de pretemporada, realizados en Sepang (Malasia). Su gran arma, la potencia y un motor peculiar y desbocado, sigue siendo la misma, según ha explicado Hayden. "¿Qué es lo mejor de la Ducati?", le han preguntado a su llegada a la fábrica. "Lo mejor de la Ducati son sus pilotos", ha respondido el de Kentucky a un público entregado.