Pura supervivencia

El Caja Laboral se enfrentará en cuartos de final al Maccabi de Tel Aviv tras derrotar ayer al Lietuvos Rytas en lo que terminó siendo un ejercicio de pura supervivencia. Los vitorianos se jugaban algo más que el pase a la siguiente fase de la Euroliga. Podía verse afectada su reputación en Europa, donde no ha faltado nunca desde que en la temporada 2004/05 se incluyera el peldaño de los cuartos de final entre el Top 16 y la Final Four.

Los rivales del Lietuvos saben que jugarán bajo la amenaza de la constante sorpresa. Normalmente, desagradable. Los de Aleksandar Trifunovic ya dieron la campanada al vencer al Panathinaikos en su propia pista. También derrotaron a los de Ivanovic con un triple del base Khalid El-Amin. Capaces de desorientar al equipo más sólido, el Lietuvos pudo añadir a su lista a Gecevicius mientras el Caja laboral incluyó a los convalecientes Teletovic y Sow. No era un buen comienzo.

El primer cuarto fue de Jasaitis, tremendo tirador. Fue el as que el Trifunovic y nadie lo vio venir. Ambos equipos se agarraron a cada minuto del partido con desesperación, conscientes de lo que se jugaban. Las distancias se fueron acortando a medida que avanzaba el segundo cuarto, después de que los vitorianos desperdiciaran ventajas de hasta 14 puntos.

El papel de guía del equipo recayó antes del descanso en Bjelica, pero en las sucesivas rotaciones fue cambiando. De Strawberry a El-Amin, de Valanciunas a Bajramovic. La confusión reinante, sobre todo del lado vitoriano, desembocó en el 39-40 con el que el Caja Laboral se fue al descanso.

El tercer cuarto discurrió entre peligros a ambos lados de la cancha. Exhibiendo su facilidad para aprovechar el más mínimo hueco defensivo, el Lietuvos sumaba puntos mientras el Caja Laboral exploraba con suerte dispar la barrera construida por los lituanos.

La sorpresa del último cuarto empezó y acabó con El-Amin. Su triple en el arranque, contrarrestado con otro de Barac, abrió el fuego de los Trifunovic. El Caja Laboral no fue capaz de aferrarse a sus mejores opciones por la descoordinación de sus habituales jugadores de referencia, Huertas, Logan, Teletovic, Barac y San Emeterio, bienintencionados, pero poco resolutivos.

El escurridizo Lietuvos se estampó contra la frenazo de los vitorianos, más interesados en conservar los seis puntos de ventaja arriesgando lo menos posible que en orquestar grandes estrategias acumuladoras de ventajas más hondas.

A minuto y medio del pitido final, El-Amin se estrelló contra Barac y se dejó la rodilla en la cancha. Incapaz de andar, fue sacado en volandas entre los aplausos de un rendido público. Dos tandas de tiros libres de Logan y Huertas pusieron el broche final al encuentro (68-77). Fue un choque templado. Escaso de ambición. Sin demasiado de nada. Pura supervivencia.