París dice sí en consulta popular a extender las ‘calles verdes’ y peatonalizar 500 vías

París avanza en su plan para convertirse en una ciudad más verde y libre de coches. Los parisinos respaldaron el domingo en una consulta popular los planes del Ayuntamiento para peatonalizar 500 calles en la capital, donde se plantarán árboles y se eliminarán 10.000 plazas de aparcamiento. El 66% de los 56.500 ciudadanos que acudieron a las urnas, apenas un 4% de los 1,4 millones llamados a votar, se pronunciaron a favor.

Estas calles arboladas y sin tráfico se sumarán a las casi 300 ya peatonalizadas en estos últimos años. Se les denomina “calles jardín” o “escolares”, pues están próximas a centros educativos. El objetivo del Ayuntamiento liderado por Anne Hidalgo es hacer la ciudad más accesible y también reducir la contaminación.

“Esta votación refuerza nuestro deseo de seguir compartiendo el espacio público en favor de los peatones y de reverdecer París para tener una ciudad cada vez más verde”, dijo tras la votación Christophe Najdovski, teniente de alcalde de París a cargo de los espacios verdes.

La idea es que cada parisino tenga “una calle verde y peatonal a menos de 300 metros de su casa”, según el edil. Aún no se han definido cuáles serán estas nuevas “vías escolares”, pues hay que valorar las que son aptas para plantar vegetación. A partir de abril se iniciarán las consultas en cada distrito para identificarlas. Se calcula que los trabajos durarán unos tres años, con un coste medio estimado de entre 150.000 y 500.000 euros por calle. En total, supondrá una inversión de 250 millones de euros.

La oposición a Hidalgo ha criticado que la financiación del proyecto no está detallada y que, a esta cifra inicial, hay que añadir la del mantenimiento. La ministra de Cultura, Rachida Dati, del partido de Los Republicanos y candidata a los comicios municipales que se celebrarán el año próximo, ha criticado que los planes se vayan a llevar a cabo a pesar de la escasa participación en la consulta.

Decenas de obras cada mes

“Los parisinos no han querido asociarse a esta campaña de comunicación del Ayuntamiento”, ha asegurado. David Alphand, vicepresidente del grupo Changer Paris, ha dicho que “500 en tres años supone una decena de obras cada mes. Es un desafío logístico colosal que no se ha negociado con las empresas del sector”.

Es la tercera consulta popular que se celebra en un año en la capital francesa. Anne Hidalgo ha promovido este tipo de referéndums ciudadanos, enfocados a conseguir el respaldo a sus planes para hacer de París una ciudad más vivible. Hace un año se votó si renovar la licencia municipal a las empresas que ofrecían patinetes eléctricos. Salió que no. También se sometió al veredicto ciudadano aumentar las tarifas de aparcamiento para los vehículos más contaminantes.

Durante su segundo mandato, Hidalgo, que llegó a la alcaldía en 2014, ha impulsado distintas medidas para liberar París del tráfico, sobre todo promoviendo transportes más sostenibles, como la bicicleta. Aunque ya no se presentará a los comicios municipales de 2026, su ambición es que la ciudad pueda ser recorrida a pedales casi en su totalidad.

Los Juegos Olímpicos celebrados el pasado verano sirvieron para acelerar estos planes. La capital cuenta con más de 1.000 kilómetros de zonas adaptadas para ciclistas, con 350 kilómetros de carriles bici, y este medio de transporte ya supera al coche en la mayor parte de los trayectos en la capital, según datos del Ayuntamiento. Dentro del nuevo plan de urbanismo, el Consistorio parisino busca crear unas 300 hectáreas nuevas de espacios verdes de aquí a 2040, para que el 40% de las calles cuenten con vegetación. En el año 2020 solo había 647 kilómetros con zona arbolada.