Junqueras y Romeva saldrán de prisión tres días a la semana para trabajar

Oriol Junqueras y Raül Romeva también disfrutarán de salidas diarias de prisión para acudir a trabajar. La junta de tratamiento de la cárcel de Lledoners (Barcelona) ha acordado aplicarles el artículo 100.2 del reglamento penitenciario. El exvicepresidente de la Generalitat y el exconsejero de Exteriores del Govern podrán salir tres días a la semana, durante seis horas cada día, para trabajar.

Junqueras fue condenado a 13 años de cárcel por sedición y malversación por el procés; Romeva, a 12 años. El Departamento de Justicia ha informado de que ambos podrán salir tres días a la semana entre lunes y viernes después de la decisión adoptada por la junta de tratamiento, un órgano formado por profesionales. Con ellos, ya son siete de los nueve líderes independentistas condenados a penas de prisión por el procés los que disfrutan o disfrutarán en breve de ese régimen flexible.

La Fiscalía se opondrá previsiblemente a la salida de Junqueras y Romeva —lo ha hecho ya con otros de los políticos presos—, aunque el recurso no paraliza la medida, por lo que ambos podrán salir en los próximos días. El juzgado de vigilancia penitenciaria, sin embargo, tendrá que tomar una decisión en los próximos días.

Los otros cinco que ya tienen concedido el 100.2 —para trabajar, para hacer voluntariado o para cuidar a familiares; incluso para varias de esas cosas a la vez— son los exconsejeros Joaquim Forn y Dolors Bassa; la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell; el exlíder de la ANC, Jordi Sànchez; y el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart. Los únicos dos condenados que por ahora no gozan de esos permisos son los exconsejeros Jordi Turull y Josep Rull.

El primer preso del procés en salir de prisión en virtud del artículo 100.2 fue Jordi Cuixart, el pasado 13 de febrero, para trabajar en su empresa y ejercer voluntariado, con un permiso de nueve horas y media, cinco días a la semana, entre lunes a viernes. La defensa de Junqueras y Romeva ha optado por una petición de salidas más restringida, de solo seis horas al día durante tres días.

En sus recursos al 100.2, la Fiscalía reprocha a la Generalitat su intención de "generalizar" la flexibilización del régimen penitenciario a todos los líderes independentistas presos, con un tercer grado "encubierto", ya que entiende que el 100.2 debe de ser de aplicación excepcional. El fiscal superior de Cataluña, Francisco Bañeres, ha defendido este jueves en una comparecencia en el Parlament esos recursos. Si la Generalitat cree que los políticos están rehabilitados, "lo razonable" habría sido concederles el tercer grado y no aplicarles un régimen flexible.