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Sánchez y Colau reimpulsarán la capitalidad cultural de Barcelona

El presidente se reúne también con Núria Marín en la Diputación de Barcelona y firma un compromiso para impulsar las energías renovables

Pedro Sánchez y Ada Colau, en el Ayuntamiento de Barcelona, este viernes. En vídeo, declaraciones de ambos tras su reunión.

La vuelta a la normalidad en Cataluña que el Gobierno quiere escenificar también tiene al municipalismo como actor necesario. De ahí que ayer, en el segundo día de su visita oficial a Barcelona, Pedro Sánchez se viera con la alcaldesa Ada Colau y la presidenta de la Diputación, Núria Marín. El presidente y Colau aprovecharon para revitalizar el convenio de la capitalidad cultural y científica de Barcelona, que el PP paró en 2011 y que implicará unos 25 millones de euros adicionales al año para los equipamientos culturales con trascendencia nacional.

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Editorial | Calma catalana

La idea de la capitalidad cultural y científica figura en la Carta Municipal de Barcelona, el régimen jurídico especial que se aprobó en 1998. En 2004, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y el municipal de Jordi Hereu firmaron el primer convenio, de 15 millones de euros. En 2010 esta cifra llegó a ser de 25,8 millones de euros, que fueron destinados a los equipamientos culturales y científicos ubicados en la capital catalana pero que por su importancia trascienden el ámbito barcelonés, tales como el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), el Liceu, la Fundación Dalí, el Museo Picasso o el Palau de la Música.

La llegada del PP a La Moncloa, en plena crisis, cerró el grifo; y ayer lo reabrieron Sánchez y Colau con una firma solemne en el Salón de Cent del Ayuntamiento. El presidente apostó por “pasar de hablar de cocapitalidad a hablar de coliderazgo”, ya que “España necesita muchos más motores de crecimiento y desarrollo y más polos de atracción y progreso”.

El texto, firmado tras una reunión de casi una hora entre Sánchez y Colau, no fija una cantidad exacta de la contribución pero sí dice que “debería estar en torno a la cifra económica del último convenio firmado en 2010”, los 25,8 millones. Barcelona tendrá, además, que batallar para que esos recursos sean efectivamente de nueva aportación y no se sumen a la partida que ya reciben los grandes equipamientos consorciados con el Gobierno.

Los grandes centros catalanes han sufrido recortes en todas sus fuentes de financiación. El MNAC pasó de contar con 20,5 millones de presupuesto total en 2008 a 13 millones en 2014. El pasado ejercicio recibió 15 millones y tiene unos 900.000 visitantes anuales.

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La reunión entre ambos mandatarios también desempolvó la comisión de colaboración interadministrativa, congelada desde 2011. Este foro, igualmente contemplado en la Carta Municipal, abre línea directa entre Barcelona y el Gobierno y su objetivo es “realizar los estudios para la mejor articulación del régimen local de Barcelona y evaluar los proyectos conjuntos”.

“Sentimos que abrimos [con la reunión del jueves con el presidente Quim Torra] una nueva etapa política en Cataluña. La agenda que presentamos está cargada de contenidos, de cohesión, de todo lo que se ha roto por incapacidad de la política”, dijo Sánchez. Según Colau, Cataluña y su capital han vivido “una década perdida” en lo que respecta a la colaboración institucional. “Vais a tener en Barcelona la principal aliada para esa nueva etapa”, prometió la alcaldesa.

Sánchez también acudió a la sede de Fomento del Trabajo, donde se reunió con unos 60 empresarios. Entre ellos, el presidente de CaixaBank, Jordi Gual, y el de Agbar, Angel Simón. El presidente de la patronal, Josep Sánchez Llibre, pidió que no se derogue la reforma laboral y que se permita que Cataluña gestione directamente el puerto y el aeropuerto.

El presidente finalizó su visita en la Diputación de Barcelona, presidida por la socialista Núria Marín. Allí firmó un convenio que prevé instalar 150 instalaciones fotovoltaicas en edificios municipales y más de 30 de producción térmica a partir de biomasa. El acuerdo está dotado con 11 millones y medio de euros.

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