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Cinco encapuchados asaltan una masía de Girona a punta de pistola

Los asaltantes ataron al dueño y a los masoveros y se llevaron 800 euros

La casa asaltada.
La casa asaltada.Toni Ferragut

Un grupo de cinco encapuchados asaltó la madrugada del pasado sábado una casa de Vilanna, en el municipio de Bescanó (Girona). Los asaltantes amenazaron pistola en mano al dueño, un empresario a quien dejaron atado con bridas, y se llevaron un botín de 800 euros, un móvil y la cartera de la víctima. Asimismo, lo amenazaron con cortarle un dedo con unas tijeras de gran tamaño si no les decía donde estaba el dinero. Los encapuchados asaltaron a los masoveros y también los dejaron atados. Luego, pincharon las ruedas de los coches para que las víctimas no se pudieran ir. Se trata del cuarto asalto violento en esta localidad o sus alrededores en los últimos tres meses. Los Mossos están intentando localizar a los autores del asalto.

El propietario de Mas Can Bonic, que se dedica a la compraventa de naves y terrenos, estaba durmiendo solo en su casa cuando sobre las cinco de la madrugada le despertaron los asaltantes, con la cara cubierta y guantes. Esgrimían tres pistolas, una escopeta y un cuchillo. Los investigadores del Área de Investigación Criminal (AIC) que se han hecho cargo del caso, piensan que los ladrones, que según las víctimas, tenían acento suramericano, sabían perfectamente donde iban, porqué le pidieron el dinero que había conseguido con la venta de una de las naves.

Los asaltantes apuntaron al dueño de la masía con una de las pistolas en la cabeza y le exigieron que les dijera dónde estaba la caja fuerte y les diera el dinero obtenido con la reciente venta. La víctima respondió que no tenía dinero. Para intimidarle lo llegaron a herir levemente. Los asaltantes estuvieron revolviendo toda la casa hasta que se llevaron el botín. 

Antes de irse, decidieron hacer también una visita a la casa que los masoveros, una pareja que reside frente al edificio principal. Para acceder a ella cogieron una escalera, rompieron una ventana situada a unos cuatro metros de altura. Sorprendieron al matrimonio durmiendo y al marido le asestaron un golpe en la frente. Les dejaron a ambos atados con bridas en la habitación y al dueño en el baño. Huyeron poco antes que empezara a amanecer.

Pasado un rato, sobre las siete y cuarto de la mañana, el empresario consiguió quitarse las bridas, liberó a sus empleados y llamó al 112 para avisar de lo sucedido. Inmediatamente se desplazaron hasta el lugar investigadores de los Mossos que tomaron declaración a las víctimas, hicieron una inspección ocular de ambas casas y tomaron muestras e indicios para intentar identificar a los asaltantes.

En el jardín de Can Bonic, localizaron una escopeta, que habían cogido de la casa, una pata de cabra de gran tamaño y una bolsa con ropa y bridas. Los investigadores intentan averiguar si los asaltantes pueden ser los mimos que en los últimos tres meses han entrado en cuatro viviendas de esta localidad o alrededores, todas ellas de empresarios y personas de alto nivel adquisitivo.

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Los vecinos de Bescanó están alarmados ante tal goteo de asaltos violentos, por ello el alcalde ya había solicitado una mayor presencia policial. A pesar de que no se ha podido impedir el asalto, si se ha notado un aumento de la presencia de agentes de los Mossos en la zona.

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