Colau lanza un plan para que la ciudad crezca hacia el Llobregat
El proyecto, a 10 años, requeriría 1.500 millones de inversión pública y privada
Si el año pasado la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, anunció un plan para los barrios del Besòs en la conferencia que da comienzo al año político en el Colegio de Periodistas, ayer giró la mirada hacia el Llobregat. La alcaldesa —que justo ha arrancado el plan del Besòs y en 18 meses de mandato no ha conseguido apoyo para el presupuesto, el plan de hoteles ni el tranvía— lanzó la idea de un segundo plan para el Delta del Llobregat. Requeriría 10 años y 1.500 millones de euros de inversión pública y privada. La zona es tan grande como el Eixample y un 23% del suelo está por desarrollar.
"Es una de las principales reservas de suelo para crecer”, defendió la alcaldesa. “Un plan ambicioso pero realista”, agregó. Colau aseguró que ya ha hablado con los operadores de la zona (Puerto, Aeropuerto, Consorcio de la Zona Franca) y con los ayuntamientos de El Prat y L’Hospitalet. Y explicó que ya tienen un listado de 30 proyectos “que dan al proyecto una potencialidad de plan estratégico del Llobregat”. Con todo, reconoció que la idea “no tendrá espacio si es un proyecto de despacho y si no responde a una necesidad ciudadana”, por lo que invitó a la ciudadanía a “participar”.
Entre los 30 proyectos en cartera —y más allá de la llegada del metro a los barrios de La Marina y la construcción de casi 12.000 pisos públicos y privados ya en marcha—, la alcaldesa desveló proyectos como la ampliación de Mercabarna con un área dedicada al producto ecológico y de proximidad; una estación intermodal en el puerto para pasar contenedores de mercancía de camiones a trenes, para evitar el tráfico por carretera; o un área de desarrollo de pequeñas y medianas empresas de economía social.
ERC insiste en consultar sobre tres hoteles
El gobierno de Ada Colau negocia contrarreloj el apoyo político a su plan de hoteles, el PEUAT. Pretende llevarlo a votación mañana. Pero sigue sin tener el apoyo de ERC, enrocado en vincular su sí a la celebración de consultas para preguntar a la ciudadanía si estaría dispuesta a gastar millones en parar tres polémicos hoteles.
Colau dijo anoche que "está en juego el modelo de ciudad" y que todos los grupos se deben a las "exigencias ciudadanas". La responsable de Urbanismo, Janet Sanz, explicó que además de blindar tres barrios a nuevos hoteles, permitirá hacer obras a los del centro, rescatar licencias de pisos turísticos hacia la periferia y flexibilizará cuestiones técnicas para abrir nuevos hoteles.
También se refirió a rescatar el proyecto de unir con una pasarela peatonal la montaña de Montjuïc con la zona del Morrot, el antiguo Can Tunis. Y, por si había alguna duda, descartó completamente la idea del ex alcalde Xavier Trias de un barrio nuevo que combinara vivienda con empresas tecnológicas, el Blau@Ictinea. “No compartimos la idea de un barrio de alto standing, queda descartado”, zanjó.
El antecesor de Colau en el cargo, Xavier Trias, criticó a la alcaldesa e ironizó sobre el hecho de que haya "descubierto el plan del Delta del Llobregat", del que él ya habló durante su mandato. "El año pasado ya descubrió el Plan Besòs, que ya estaba hecho y ahora nos trae un plan industrial y agrícola para el Llobregat, del que se habla desde hace años y que nosotros ya dejamos diseñado".
Nueva agenda política
Durante su conferencia Colau reconoció las dificultades de gobernar en minoría —que impidió aprobar la hoja de ruta del mandato y la ha llevado a aprobar las cuentas con una cuestión de confianza— y puso en valor el pacto con el PSC. Por ello apostó por “alcanzar acuerdos lo más amplios posible” con los grupos municipales, también CiU.
La alcaldesa subrayó que su gobierno ha duplicado el gasto corriente en servicios sociales, la apuesta por la vivienda social o la lucha contra las desigualdades. Y presumió de “haber cambiado la agenda política y sus prioridades planteando topes al precio del alquiler o el debate sobre el turismo”, además de su apuesta por la “transparencia” y descentralizar las decisiones.
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