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Fira Tàrrega cierra su 36ª edición con récord de visitantes

14.450 espectadores participan en los 60 montajes programados en el festival de teatro

Didi Rodán durante su espectáculo 'Huellas en la arena'.
Didi Rodán durante su espectáculo 'Huellas en la arena'.

El festival de teatro de Tàrrega cerró ayer sus cuatro días con un nuevo récord de asistencia. Si el año pasado los 13.000 espectadores significaron un crecimiento del 5%, este año las cifras se doblan y los 14.450 que han vivido y participado en los espectáculos de calle en esta localidad entre el jueves y ayer domingo representan un crecimiento del 10%.

El punto final a cuatro días de catarsis teatral donde en cada esquina de esta localidad leridana, capital de la comarca del Urgell, puedes encontrarte una de los 60 espectáculos programados de 57 compañías —34 de los cuales estrenos absolutos— lo pusieron ayer la compañía catalana Lapública con Barcelona (contra la paret), un espectáculo donde se exponen las contradicciones de la capital catalana y la madrileña Didi Rodán con su espectáculo Huellas en la arena, donde se narra con la sola ayuda de este elemento un viaje lleno de destrucción y guerra protagonizado por un niño.

Durante estos cuatro días se han llevado a cabo 263 sesiones en 26 espacios de exhibición, algunos tan originales como un campo lleno de arbustos donde no hay nada (Terre condere de Maria Capell), o debajo de un puente a las afueras de la localidad donde se representó A mí no me escribió Tennessee Williams, dirigida por Marc Rosich e interpretada por un travestido Roberto G. Alonso que da vida a una actriz madura y desahuciada que reflexiona en cómo habría sido su vida si se hubiera cruzado con el dramaturgo.

Bajo la llamada de la interculturalidad el festival vivió este fin de semana un lleno absoluto con riadas de gente llenado las calles de esta localidad de unos 17.000 habitantes. Bajo este paraguas de interculturalidad, en el que fue un claro ejemplo The colour of Time, el espectáculo de inauguración de la compañía francesa Artonik, en la que todos los asistentes acabaron participando en una fiesta teatral al estilo holi de la India, los espectáculos seleccionados han viajado desde la justicia social a la construcción de la ciudadanía. El hilo conductor de la próxima edición, la de 2017, será, según explicó Jordi Durán, el director de la fira, la naturaleza participativa.

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