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Un empresario encausado por fraude reconstruirá el consistorio de Beade

El alcalde del PP adjudica la obra por vía urgente a Cruzval, administrada por un primo del delegado de la Xunta

Baltar, Rueda, el alcalde y el delegado de la Xunta, tras presentar el proyecto
Baltar, Rueda, el alcalde y el delegado de la Xunta, tras presentar el proyectonacho gómez

Reconstruir el Ayuntamiento de Beade (Ourense), destruido hace algo más de un año por una bomba que el Gobierno central atribuye a Resistencia Galega, costará 275.000 euros. Desde entonces, este pequeño pueblo de 500 habitantes ha mantenido la actividad municipal sin casa consistorial. Ansiadas por el alcalde popular Senén Pousa, un vigoroso admirador del franquismo cuyo despacho oficial era un templo en honor del dictador Francisco Franco, las obras acaban de comenzar y el dinero público que resucitará al edificio del precinto ha ido a parar a una constructora cuyo administrador es Gumersindo Álvarez Martínez, un empresario encausado por el presunto fraude de fondos europeos en el mismo caso judicial que salpica a su primo Rogelio Martínez, el delegado en Ourense de la Xunta de Galicia.

 Según el juez de instrucción y los investigadores de la Unión Europea que indagaron en el destino del dinero, Construcciones y Promociones Cruzval —la empresa que trabaja en la reconstrucción del Ayuntamiento de Beade— y su administrador están enredados en la supuesta trama corrupta urdida en el municipio de Arnoia, ubicado a solo 10 kilómetros de Beade. De hecho, el superdelegado de la Xunta en Ourense, su pariente constructor y otras ocho personas están a punto de sentarse en el banquillo de los acusados. Así lo ha ordenado la Audiencia Provincial de Ourense, después de un interminable periplo judicial iniciado hace ocho años por el que han pasado media docena de jueces y que los implicados han tratado de frenar mediante una batería de recursos. Y mientras el juicio espera hueco en el calendario, la empresa Construcciones y Promociones Cruzval sigue acumulando contratos de Administraciones públicas de la zona.

El pasado 19 de septiembre, el alcalde de Beade posaba flanqueado por el vicepresidente y conselleiro de Presidencia del Gobierno gallego, Alfonso Rueda, y por el presidente de la Diputación de Ourense, José Manuel Baltar Blanco. Senén Pousa estaba “encantado” porque gracias a sus aportaciones “al fin” iba a poder volver al despacho que ocupa desde 1974. Minutos antes de esa foto firmaba un protocolo para rehabilitar el edificio con un presupuesto de 290.000 euros. Diez días después rubricaba la adjudicación del contrato para la rehabilitación y el equipamiento del Ayuntamiento a la empresa del primo de Rogelio Martínez.

El pasado 7 de octubre, exactamente un año después de aquella potente bomba que destruyó la planta baja del edificio consistorial, el Boletín Oficial de la Provincia de Ourense publicaba la adjudicación urgente. Cruzval también está salpicada en otra denuncia contra la gestión del superdelegado cuando era alcalde de Arnoia, en la que se relata cómo construyó un tanatorio ilegal sobre un cementerio y al lado de la iglesia del pueblo con todos los informes de la Dirección Xeral de Patrimonio desfavorables.

Senén Pousa recuerda que la potente bomba “fue dedicada al alcalde por una cuestión personal pero le ha hecho daño a todo el pueblo” y por eso quiere que la casa consistorial reabra sus puertas cuanto antes. Desde la explosión han cambiado algunas cosas: trabaja en unas oficinas prestadas por la mancomunidad de O Ribeiro y los símbolos franquistas que decoraban su despacho oficial fueron trasladados a su casa. La bandera de España con la figura del dictador, los libros sobre su vida y obra, el escudo preconstitucional del águila o las botellas de vino con la cara de Franco no volverán al edificio.

Aunque no hay novedades sobre la autoría del atentado, los investigadores y algunos dirigentes de la Xunta y del Gobierno central lo relacionan con la explosión que el pasado 1 de octubre también destrozó parte del consistorio del municipio lucense de Baralla. Para el alcalde de Beade, que hace unos días era nuevamente refrendado por el PP como candidato a las próximas elecciones municipales de mayo de 2015, los autores del atentado “son unos cobardes”: “Sé perfectamente quiénes son y que disparan por la espalda”. “Que Dios los tenga en la gloria y que sigan haciendo el mismo daño a Galicia y a España que es para lo único que valen”, insiste Senén Pousa entre deseos de que “algún día tengan su castigo”.

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