L’Eliana sortea diez huertos de ocio entre sus vecinos
Las parcelas deben cultivarse de forma ecológica y la cosecha se destinará a consumo doméstico
El Ayuntamiento de l'Eliana (Valencia) ha iniciado los trámites para el sorteo, entre todos aquellos que estén empadronados en este municipio, de diez parcelas para huertos de ocio en el jardín Hort de Les Taules, que deberán dedicarse al cultivo de agricultura ecológica.
El proyecto parte de una iniciativa puesta en marcha por el Ayuntamiento hace dos años que consistía en la celebración de unos talleres gratuitos sobre huertos de ocio y ecológicos que después ha ido afianzándose.
Las parcelas, que se cederán por un año, deberán destinarse al cultivo hortícola o floral de forma ecológica, quedando prohibido el uso de los productos herbicidas, plaguicidas o abonos químicos no autorizados, según consta en las normas reguladoras aprobadas por el Ayuntamiento.
El adjudicatario tendrá la obligación de cultivar él mismo su parcela, que no podrá ceder o arrendar a otra persona, como tampoco vender los productos que obtenga, que deberán destinarse exclusivamente al consumo doméstico.
El usuario deberá instalar un sistema de riego localizado y no podrá utilizar mangueras
Está prohibido el cultivo de árboles así como la instalación de cualquier elemento que no se destine específicamente al cultivo de la tierra, como casetas o invernaderos; y el uso de trampas y de cebos que incluyan sustancias venenosas.
El usuario, que deberá instalar un sistema de riego localizado y no podrá utilizar mangueras, tiene la obligación de recoger los residuos vegetales generados en la actividad de cultivo según establece la ordenanza municipal sobre protección de los espacios públicos.
El abandono del cultivo del huerto por causas injustificadas durante un periodo superior a dos meses supondrá la pérdida del mismo, al igual que sucede si el adjudicatario comete una infracción grave o muy grave, como pueda ser la realización de obras o modificaciones en la parcela.
El cultivo de especies que provoquen un deterioro de la tierra, la generación de "una grave contaminación del suelo", impedir la actividad a otros titulares de licencias, la producción de plantas invasoras o la comercialización de los productos obtenidos son otros de los motivos que pueden provocar la retirada de la licencia.
Las infracciones graves conllevarán una multa de hasta 1.500 euros, y las muy graves de 3.000, y en el supuesto de que se hubieran causado daños a las instalaciones deberán dejar las cosas "a su estado de origen, reparando el daño ocasionado".
