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Argentina juzga una violación grupal en un coche a plena luz del día en Buenos Aires

Los seis detenidos por la agresión que conmocionó al país en marzo de 2022 enfrentan penas de hasta 20 años. Las audiencias serán a puerta cerrada

Caso Palermo violación grupal
Los sospechosos fueron detenidos en el barrio de Palermo, Buenos Aires.RR.SS.

La violación grupal a una joven en Buenos Aires conmocionó Argentina a comienzos de 2022. Fue un lunes de carnaval, a plena luz del día, en el corazón de un barrio turístico de la capital. Según la cronología de la Fiscalía, cuatro hombres se turnaron para violar a una mujer de 20 años en el interior de un coche mientras otro dos aguardaba afuera. Hasta que una comerciante se percató de lo que ocurría y pidió ayuda. La joven salió del coche con ayuda de los vecinos y los presuntos agresores fueron detenidos por la policía, que llegó después. El juicio ha empezado este lunes a puertas cerradas. Los seis acusados están imputados por el delito de abuso sexual agravado y enfrentan penas de hasta 20 años de prisión.

La primera de las siete audiencias previstas hasta finales de septiembre ha comenzado este lunes con la lectura de las acusaciones. Los presuntos agresores, que tienen entre 21 y 25 años y han aguardado el juicio en prisión preventiva, están imputados por “abuso sexual con acceso carnal agravado por la intervención de dos o más personas”, un delito que prevé penas de ocho a 20 años de cárcel.

El fiscal Eduardo Rosende planteó en el requerimiento de elevación a juicio hace un año que hubo un “plan común” de los seis acusados “en aras de satisfacer sus deseos libidinosos” y que lo hicieron “aprovechándose de la vulnerabilidad de la víctima”. “A partir de una predisposición de agresión sexual que fue progresivamente aumentando su intensidad, mediante una gesta conjunta y entrelazada entre los seis acusados con el correr de las horas, se produjo la peor parte del hecho”, expresó el representante del Ministerio Público en el escrito.

La secuencia de lo ocurrido fue reconstruida por la Fiscalía a partir de los testimonios de testigos y de las cámaras de seguridad de la zona. La víctima había acudido con un amigo a una discoteca en el barrio de Palermo la noche anterior. Allí conocieron a dos de los imputados. Cuando el lugar cerró, todos se movieron a Plaza Serrano, un espacio rodeado de bares, tiendas y discotecas en el corazón del barrio. Sobre las once de la mañana, se encontraron con los otro cuatro imputados y fueron a comprar más bebidas. Según la acusación, para entonces era evidente el grado de intoxicación y vulnerabilidad de la joven.

El amigo de la chica se retiró y ella quedó sola con los seis acusados. Cerca de las tres de la tarde, los seis hombres llevaron a la víctima al interior de un Volkswagen color blanco estacionado frente a una panadería, donde algunos del grupo se turnaron para abusar de ella, según la querella. Fue una empleada de ese local quien advirtió lo que ocurría y dio aviso al 911. Su marido intervino y fue agredido, igual que otro testigo, que sufrió lesiones leves. La Policía llegó al lugar y detuvo a los seis acusados. La víctima fue llevada al hospital y, finalmente, con su familia.

Hugo Figueroa, abogado de la joven, que hoy tiene 21 años, declaró esta mañana ante los medios presentes en el exterior del tribunal que existió “una participación necesaria de todos”: “Entendemos que sin el accionar de cada uno de ellos no hubiera llegado al desenlace final esta situación”. Figueroa aseguró que para la querella “cada uno tuvo un rol preponderante” en la agresión y que “hubo dos autores y el resto son partícipes necesarios”. La declaración de la víctima no tiene fecha aún y se especula con que pueda ser realizada de forma remota.

Familiares y amigos de los imputados han defendido este lunes en las puertas del tribunal que los acusados “son inocentes” y que “hay muchas pruebas que van a dar un giro terrible” en el juicio. “Estamos muy optimistas, para nosotros es un gran día. Es el día en el que vamos a poder mostrar las pruebas reales, los videos y los testimonios”, afirmó una de las familiares a los medios presentes. Alrededor, las personas concentradas para apoyar a los acusados se manifestaban con carteles que decían “basta de falsas denuncias” o “justicias sí, escraches no”.

Solo dos de los seis acusados declararon en la etapa indagatoria. Las pruebas de ADN de dos de ellos confirmaron que sus perfiles genéticos estaban en el semen hallado en la ropa interior de la víctima y en el interior del auto. En el caso de uno de ellos, además, se halló su patrón genético bajo las uñas de la chica. En las próximas audiencias –se realizarán dos por semana– se espera que declare cada uno de ellos. Además de estar imputados por abuso sexual agravado, están acusados por las “lesiones leves” que supuestamente causaron a un testigo.

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