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La policía argentina investiga la muerte de un hombre que atacó a un árbitro durante un partido de fútbol amateur

La familia de Alexander Williams Tapón, de 24 años, denuncia que la presión de los medios y una amenaza del referí al que golpeó en un vídeo viral llevaron al joven al suicidio

José Pablo Criales
Alexander William Tapón
Alexander Williams Tapón al momento de atacar al árbitro, en una captura de pantalla del video viral.

Alexander Williams Tapón, un hombre de 24 años, fue hallado muerto este lunes por la noche en la periferia sur de Buenos Aires. El fin de semana, un vídeo en el que se le veía agredir al árbitro durante un partido de fútbol de un torneo barrial se viralizó en redes sociales. Tapón corrió desde un extremo de la cancha para buscar al juez, lo golpeó tres veces, y mientras caía le dio una patada en la espalda. El lunes, el árbitro Cristian Paniagua lo denunció y la Justicia imputó a Tapón por tentativa de homicidio. La policía investiga ahora su posible suicidio después de encontrarlo con un disparo en la cabeza.

El martes a última hora de la tarde, la hermana de Tapón entregó a la policía el arma con la que su hermano supuestamente se habría suicidado. Según el diario La Nación, Tapón había sido hallado por sus amigos cerca de las vías del tren Roca, que une Buenos Aires con su periferia sur. Su cuerpo fue llevado hasta la puerta de su casa, donde lo encontró la policía, que no había podido dar con el arma. Mientras avanza el peritaje, el suceso ha vuelto a destapar la olla de la violencia en las canchas del fútbol amateur argentino.

Hace justo un año otro hombre había sido detenido por golpear a una árbitra durante un partido de otro torneo regional de Buenos Aires. Según las últimas noticias sobre ese caso, el agresor, Cristian Tirone, recuperó la libertad con una condena de dos años de prisión en suspenso a finales de agosto de 2022, tras pasar un mes detenido en una comisaría. La árbitra, Dalma Cortadi, también volvió a trabajar tras sufrir un traumatismo de cráneo a un costado de la nuca. Las denuncias de violencia contra los árbitros de torneos de aficionados proliferan en redes sociales, pero estos dos casos tienen otro hilo en común: Argentina vio los sucesos desarrollarse en directo y en televisión tras la viralización de las agresiones.

Paniagua sufrió la agresión durante el séptimo partido de once que iba a dirigir el pasado sábado 15 de julio, según su declaración en la comisaría publicada por el medio deportivo Doble Amarilla. El árbitro dijo a los policías que tomaron su denuncia que el ambiente era hostil, que había visto a los jugadores beber alcohol antes del partido, y que todo sucedió después de expulsar a otro jugador del equipo de Tapón, que se había pasado el partido insultándolo.

“No midió las consecuencias, me pudo haber matado. Me pude comunicar con él, pero no hubo una respuesta favorable de su parte. No pidió perdón”, denunció Paniagua el lunes por la noche al canal El Trece desde la puerta de una comisaría de Sarandí, en la provincia de Buenos Aires, donde la policía tomó su declaración. El hombre, de 36 años, contó que es padre soltero de dos hijos, que trabaja en una empresa de limpieza de vidrios en altura y que solía aprovechar los fines de semana para arbitrar torneos de aficionados para generar un ingreso extra. “Viendo el video una y otra vez doy gracias a dios por estar acá con mi hijo, estar con vida en mi casa”, contó en la entrevista Paniagua. “La saqué barata, pude no contarla. Quiero que sirva esto más que nada para que se termine la violencia que hay hacia los árbitros”.

Williams Tapón también había sido entrevistado en televisión. Horas antes de ser hallado sin vida, habló con Telefe Noticias. “Ya venía enojado”, dijo Tapón. Pensaba que el arbitraje había sido favorable al otro equipo y, como capitán, fue quien se enfrentó al árbitro. “Hoy estuvimos hablando con el referí, le pedí disculpas. Me nubló. No fue queriendo”, dijo en el único corte de la entrevista que todavía se puede ver en redes sociales.

Su familia denuncia que Tapón se suicidó por la presión de los medios y porque el árbitro Paniagua le había exigido 300.000 pesos argentinos (unos 1100 dólares, al cambio oficial) para levantar la denuncia. “Sufrió mucha presión durante el día, él inclusive accedió a las cámaras de televisión a pedir disculpas y a contar lo que había pasado. Lo único que hicieron fue exponerlo, lo juzgaron todos”, dijo una de sus hermanas este martes al canal de noticias C5N. “Sí, reaccionó violento, pero imagino que todos los que están mirando la televisión alguna vez reaccionaron mal”. Otro de sus hermanos le dijo a El Trece que Tapón “se sentía mal” y que pidió disculpas, pero que el árbitro lo amenazó con la denuncia si no le daba el dinero.

Paniagua negó haber extorsionado a Tapón. “Yo no quería que el pibe se haga algo. Hablamos, pero no le pedí plata. Solo esperé que salga de su corazón un ‘loco, sabés qué, me confundí. Disculpame”, dijo este martes en una entrevista radial.

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Sobre la firma

José Pablo Criales
Es corresponsal de EL PAÍS en Buenos Aires. Trabaja en el diario desde 2019, fue redactor en México y parte del equipo de la mesa digital de América. Es licenciado en Comunicación por la Universidad Austral y máster de Periodismo UAM / EL PAÍS.

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