_
_
_
_
_

José Oriol Bosch, director de la BMV: “Ser una empresa pública no ha sido atractivo para muchas empresas en México”

La Bolsa espera que la nueva Ley del Mercado de Valores impulse la cotización de empresas medianas en un país con menos del 5% de población inversionista minorista

José Oriol Bosch
José Oriol Bosch en Ciudad de México.Aggi Garduño
Isabella Cota

La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) tuvo un buen año en 2023, pero no por las razones que se esperarían. La BMV no ha logrado que ni una sola empresa salga a bolsa desde 2017. Incluso grandes corporativos se han deslistado en los últimos años. Lo que ha sucedido, explica su director general José Oriol Bosch (España, 57 años), es una migración a la deuda como fuente de financiamiento. La informalidad, las tasas de interés históricamente altas y una falta de cultura de gobernanza corporativa están detrás de la sequía.

“El producto principal de financiamiento en la Bolsa Mexicana de Valores ha sido la deuda, no el capital”, dice Bosch en entrevista por videollamada. El año pasado empresas recurrieron a la BMV para emitir 600.000 millones de pesos en deuda, un salto de 60% en comparación con 2022. Más de la mitad fue deuda de largo plazo, que es la que detona crecimiento y planes de expansión, explica Bosch. De esta, el 40% fue etiquetada para negocios que cumplen objetivos Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG). En el mercado de deuda, la BMV tuvo un 96% de participación.

La empresa, fundada hace 130 años, celebra este desempeño, pero quiere revivir el mercado de capitales y tiene sus esperanzas puestas en la nueva Ley del Mercado de Valores, la cual entró en efecto a finales del año pasado.

Pregunta. ¿A qué se debe la sequía en Ofertas Públicas Iniciales (OPI)? Es una tendencia global, pero en México es particularmente fuerte.

Respuesta. En México tenemos dos mundos: el de la deuda, en donde estamos muy contentos, y la parte de capitales, en donde no lo estamos. Ha habido algunas colocaciones subsecuentes, pero no hemos tenido OPIs en estos últimos años. El contraste entre uno y otro se debe, en parte, a la oportunidad que está teniendo México de recibir las cadenas de suministro que salen de otros países, el nearshoring. Nuestras ventajas no son solo la demografía, la capacidad industrial, la calidad de mano de obra y la competitividad, también lo es nuestra estabilidad macro financiera. Esto está detonando una demanda de recursos de financiamiento para que las empresas puedan aprovechar esta oportunidad económica y se puede hacer a través de dos productos, emitir deuda o admitir nuevos socios a través de acciones. Cuando eres una empresa pública que está listada en la Bolsa, tienes una transparencia financiera y de gobernanza mucho mayor a una empresa que es una privada.

En México claramente ser una empresa pública no ha sido atractivo para muchas empresas. La prueba está en una economía informal de cerca del 60%. Ese dato, si lo comparamos con cualquier otro país o economía del tamaño de México, es un número enorme. Si la tendencia es hacia la informalidad, hacia la no transparencia, eso también puede ser un freno para para atraer empresas. Además, en este momento tenemos la tasa de interés más alta en la historia de 11,25%. Ese es un competidor importante para el mercado de valores que frena la demanda de capitales. ¿Para qué me voy a meter a una inversión de mayor riesgo que son las acciones cuando tengo una inversión libre de riesgo al 11,25%? En México y a nivel global no solo han bajado los OPIs, sino que ha habido empresas que se deslistaron. El tema de las valuaciones ha sido importante, así como también las reestructuras corporativas.

P. ¿Cuál es la expectativa con los cambios a la Ley del Mercado de Valores?

R. Es una buena noticia que se haya hecho esta reforma. Nosotros vemos que las autoridades financieras reconocen la importancia del mercado de valores en un país como uno de los pilares del financiamiento y desarrollo económico. Reconocen que no estamos viendo el crecimiento que deberíamos ver. En el mercado de capitales tenemos cerca de 140 empresas listadas, cuando en México tenemos cerca de cinco millones de empresas. La mayoría son pequeñas o micro. Pero pocas empresas medianas tienen acceso a financiamiento a través del mercado de calores. La reforma está enfocada en estas empresas medianas. Se busca que las colocaciones sean más ágiles, rápidas, que tengan menos requerimientos y que el costo sea menor. Estamos a la espera de la regulación secundaria que se tiene que hacer en un plazo de un año. Estamos trabajando como bolsa con reguladores y autoridades para que estos cambios puedan salir lo antes posible.

P. Una de las críticas que se hace mucho en México es que no existe una cultura de gobernanza corporativa. ¿Le parece válida?

R. Es válida en términos generales, pero definitivamente hay empresas que han hecho una gran labor, que sí tienen una cultura de gobernanza. Empresas locales, no necesariamente empresas multinacionales, empresas familiares mexicanas que tienen una cultura de gobernanza muy importante. Son cambios positivos que no se van a dar de la noche a la mañana y la gobernanza corporativa ha sido un enfoque de la Bolsa en los últimos años. Si tuviera que resumir en cuatro palabras la situación actual del mercado de capitales sería: falta de educación financiera. La gobernanza es parte de esta educación.

Estamos haciendo un esfuerzo en la Bolsa por educar al empresario y al inversionista, a los dos lados. Estamos educando sobre los beneficios que tiene la gobernanza, como la permanencia de las empresas en el tiempo. La esperanza de vida de una empresa mexicana, según los datos del Inegi, es de 8,4 años en promedio. Cerca del 30% de las empresas familiares sobreviven el paso a una segunda generación. Y si nos vamos a la tercera generación, el dato es 5% de ese 30%. Es decir, solo 1,5% del total. Y no siempre tiene sentido. Hay empresas muy rentables pero que, dado que no tienen cultura de gobernanza no tienen un enfoque de mediano, de largo plazo. Pueden tener conflictos de interés, pueden tener una serie de cosas que llevan a que la empresa no sobreviva en el tiempo, cuando podría ser una empresa muy exitosa. Yo creo que la Bolsa es una de las mejores formas de incrementar esa cultura de gobernanza de una empresa.

Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS México y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este país

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

Isabella Cota
Es corresponsal económica para América Latina. Como periodista de investigación trabajó con Quinto Elemento Lab, NHK, BusinessWeek y OpenDemocracy, entre otros. También fue staff de Bloomberg News y Reuters en Centroamérica y Reino Unido. Es licenciada en Comunicación y Máster en Periodismo de Negocios y Finanzas por City University London.
Tu comentario se publicará con nombre y apellido
Normas

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_