El Gobierno recorta el presupuesto actual en un 5,6%

La realidad se ha impuesto. El Gobierno de Gustavo Petro ha recortado una vez más el monto del presupuesto para este año, que de más de 502 billones de pesos (unos 120.000 millones de dólares) aprobados por el Congreso inicialmente, ya solo suma 472 billones. “No se obtuvo la meta de recaudo, de tal manera que parte del presupuesto del 2024 no está adecuadamente financiado y nos hemos visto obligados a hacer este tipo de ajuste”, ha explicado el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, en la mañana de este miércoles desde Cartagena. La reducción de 28,4 billones de pesos fue aprobada por el Consejo de Ministros en su reunión de este martes, y el decreto que detallará los ajustes debe ser expedido en los próximos días. Con el ajuste, el monto para 2024 sigue siendo el más alto de la historia, pero el aumento frente a 2023 es de tan solo un 2%.

La decisión no es sorprendente. Para abril de este año, la recolección de impuestos marcaba una caída del 10,3% frente a los mismos meses del año anterior, el primer dato negativo en más de una década. El primer director de la entidad que recauda los impuestos nacionales, la DIAN, Luis Carlos Reyes, señalaba desde entonces que se trataba de un evento estacional. “El año pasado se efectuaron retenciones muy altas a las empresas petroleras basadas en los precios del barril de petróleo, que también eran muy altos. Este año, con los precios más bajos, y la decisión de la Corte Constitucional de tumbar la no deducibilidad de las regalías, las mismas empresas petroleras y mineras tienen unos saldos a favor muy grandes con los cuales pagan sus impuestos. Todo eso implica un recaudo menor”, explicaba entonces el hoy ministro de Comercio.

Bonilla ha dicho algo similar al anunciar el tijeretazo: “Por anticipos en retenciones en la fuente, el año pasado se recaudó el impuesto renta de 2023 y 2024 al tiempo. Ese episodio no se puede repetir en el 2025 porque no hay ese tipo de anticipos este año y, por lo tanto, debe recuperarse la normalidad y el recaudo del impuesto de renta”.

Efectivamente, según los datos oficiales de recaudo de la DIAN, hasta el pasado septiembre, el impuesto de renta había recogido 15 billones de pesos (unos 3.000 millones de dólares) menos que en el mismo lapso de 2023. Otros tributos han caído, como el impuesto al patrimonio y los cobros de aranceles e IVA a las importaciones. Y los restantes han crecido por debajo del 9,68% en el que cerró la inflación de 203. Por ejemplo, el IVA ha crecido un 5,95%, el gravamen a los movimientos financieros (más conocido como GMF o 4x1.000) en 2,84%, y el impuesto al consumo un 6,51%. La excepción es el llamado Simple, un impuesto que unifica varios tributos para los pequeños contribuyentes y ha aumentado un 54,98%. En total, el recaudo de la DIAN ha caído de 224 billones en septiembre de 2023, a poco menos de 206 en el mismo mes de este año.

Aunque el recorte busca enfrentar esa reducción, se mantiene abierto el debate sobre el monto necesario para evitar que el déficit vaya más allá de lo que permite la Constitución en la llamada regla fiscal. El comité autónomo de la regla fiscal (CARF), un grupo independiente de expertos designados por el Gobierno, señalaba una semana atrás que se requería una reducción sustancialmente mayor. “La reducción del gasto fiscal en el presupuesto que se requiere para cumplir con la meta de la Regla Fiscal para 2024 se estima en COP 56,2 billones”, se lee en su pronunciamiento público fechado el 19 de noviembre.

Pese a ello, el ministro Bonilla ha defendido la decisión tomada por el Gobierno. “Existe un cordial desacuerdo con el CARF en términos de la magnitud del recorte y de qué es lo necesario. Estamos trabajando en la misma línea, que es garantizar que no se rompa la regla fiscal y poder cumplir con los objetivos macroeconómicos”, ha señalado. También ha aclarado que no se disminuirán recursos para la salud ni la educación, y que si bien la idea era reducir el presupuesto en 33 billones de pesos, la emergencia invernal declarada hace tres semanas por el presidente demanda recursos adicionales.