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El Senado elige a su antiguo secretario, Gregorio Eljach, como el nuevo procurador general de Colombia

Por mayoría absoluta, y con el apoyo de todos los partidos, la plenaria escogió al candidato ternado por el presidente Gustavo Petro, por encima de Luis Felipe Henao, postulado el Consejo de Estado, y Germán Varón Cotrino, propuesto por la Corte Suprema de Justicia

Gregorio Eljach habla en la plenaria del Senado durante la elección del nuevo Procurador General de la Nación, en Bogotá, el 2 de octubre de 2024.
Gregorio Eljach habla en la plenaria del Senado durante la elección del nuevo Procurador General de la Nación, en Bogotá, el 2 de octubre de 2024.Senado de la República
Juan Miguel Hernández Bonilla

El Congreso ha elegido en la tarde de este miércoles al nuevo procurador general de Colombia. Por mayoría absoluta y sin sorpresa alguna, la plenaria del Senado escogió a quien fue su secretario hasta el pasado septiembre y durante doce años, Gregorio Eljach, para liderar el ministerio público. El poderoso Eljach, ternado por el presidente Gustavo Petro, venció con 95 votos, a Luis Felipe Henao, candidato del Consejo de Estado, (3 votos) y a Germán Varón Cotrino, postulado por la Corte Suprema de Justicia (2 votos). Hubo tres votos en blanco. El ganador, que tuvo el apoyo de todos los sectores políticos, desde el gobiernista Pacto Histórico, pasando por los partidos tradicionales Conservador, Liberal y la U, hasta el opositor Centro Democrático, remplazará a la actual procuradora Margarita Cabello en enero de 2025 y tendrá un período de cuatro años.

La Procuraduría es uno de los entes de control más poderosos del Estado colombiano, porque tiene entre sus funciones la de investigar, sancionar, intervenir y prevenir las irregularidades disciplinarias cometidas por los funcionarios públicos, incluidos los congresistas, los alcaldes y otros gobernantes elegidos por voto popular. Eljach lleva más de una década sirviendo y ayudando a los senadores, los conoce muy bien y tiene relaciones cercanas con muchos de ellos, independientemente del partido político al que pertenezcan. Ahora será el encargado de investigarlos. El nuevo procurador, además, tendrá a su disposición un presupuesto multimillonario y cientos de puestos de libre nombramiento y remoción en todas las regiones del país, pues la Procuraduría también acompaña los proceso judiciales y vela por la protección de los Derechos Humanos, de la mano con la Defensoría del Pueblo.

Muchos de los senadores que eligieron al abogado esperan de él neutralidad e imparcialidad política a la hora de tomar decisiones. Jael Quiroga, de la bancada de Gobierno, explicó así los motivos de su voto: “No hay nadie en el Senado que pueda quejarse de que Eljach no le prestó el servicio que necesitaba ni cumplió a cabalidad su responsabilidad, sin distingo de partidos o ideologías”. Berenice Bedoya, de la Alianza Social Independiente, se expresó en el mismo sentido: “Eljach tiene muy buena acogida, ha sido hombre imparcial e inteligente, queda en buenas manos la procuraduría”. Una de las pocas voces que no apoyó la candidatura fue la de David Luna, uno de los senadores más visibles del opositor de Cambio Radical: “Hoy, ante la inminente elección del próximo procurador, tengo la responsabilidad de actuar en coherencia con mis principios. Por esa razón, he decidido votar en blanco. No considero pertinente que el candidato que llegue a ocupar este cargo sea el ternado por el presidente Gustavo Petro”. Antes de la votación, el ministro del Interior y antiguo senador liberal, Juan Fernando Cristo, le pidió al nuevo procurador independencia. “Que le dé garantías, no a los sectores políticos, sino a la sociedad colombiana, sobre su ejercicio”.

Con la elección de Eljach, el presidente gana un pulso al exvicepresidente Germán Vargas Lleras, líder de Cambio Radical y antiguo jefe político y amigo de los otros dos candidatos, Henao y Varón Cotrino. Esa victoria parecía un imposible hace tan solo unas semanas, antes de que se conociera el seleccionado por el mandatario y cuando se creía que buscaría un procurador más cercano a él. El costo de la victoria para Petro fue dejar atrás su historial de postular mujeres técnicas, con hojas de vida idóneas para ocupar las cabezas de las poderosas entidades de control, como lo hizo con la Fiscalía y la Defensoría. Aunque Eljach no ha sido cercano al movimiento político de Petro, su nombramiento le garantiza al presidente que el procurador general no será un opositor radical a su Gobierno, como es Margarita Cabello, la actual encargada de ese puesto, quien fue ternada por el expresidente Iván Duque y ha sido criticada por supuestamente tomar decisiones sesgadas contra el Gobierno o en favor de sus críticos, como el anuncio del archivo definitivo de la investigación contra Karen Abudinen, exministra de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) en el Gobierno Duque, por el caso de Centros Poblados, en el que se perdieron 70.000 millones de pesos para llevar internet a escuelas rurales.

¿Quién es Gregorio Eljach?

El nuevo procurador nació en Fusagasugá, Cundinamarca, en 1956, creció en el caribeño departamento del Cesar y estudió derecho en la Universidad del Cauca. En Popayán conoció a quien sería su padrino político, el liberal Aurelio Iragorri Hormaza. Tras ser su asesor técnico en el Congreso por varios años, el entonces barón electoral lo ayudó a convertirse en funcionario del Congreso. En 2012, cuando Iragorri era uno de los senadores más poderosos del gobiernista Partido de La U, Eljach fue elegido secretario del Senado, un cargo de mucho poder en la filigrana interna del Legislativo. Es quien tiene la potestad para definir la ubicación de los parlamentarios, elegir contratistas y debe velar por la legalidad de todas las sesiones plenarias del Senado. Influye en el orden del día y en el desarrollo de la votación de todos los proyectos de ley, como una suerte de notario del Congreso.

En los pasillos del Congreso se dice que Eljach les ha guardado algún secreto o les hizo un favor a muchos de los senadores. Cercano al actual presidente del senado, el conservador Efraín Cepeda, también lo fue al anterior, el verde opositor Iván Name, y en general ha mantenido buena relación con senadores de todas las vertientes. Petro, quien ocupó una curul en el Senado entre 2018 y 2022, lo vio trabajar, y varios de sus aliados también han sesionado con Eljach actuando como su secretario. Justamente, la capacidad política del ahora procurador se nota en esas buenas relaciones y en no ser visto como parte de un solo sector político, pese a provenir del corazón de la política tradicional.

Eljach ha enfrentado varios escándalos en su carrera. La fiscalía encabezada por Eduardo Montealegre lo investigó por la presunta filtración de información reservada al condenado exmagistrado Jorge Pretelt. La revista Vorágine publicó hace poco una investigación que revela audios en los que queda en evidencia que Eljach recibía órdenes del condenado y difunto exsenador Mario Castaño para nombrar personas en el Senado. Pese a las denuncias, el Senado en pleno eligió a Eljach. En la intervención previa a las votaciones, Eljach anunció sus objetivos principales al frente del órgano de control: “Comencé mi vida como personero municipal y será un honor terminarla como Procurador”. El nuevo procurador anunció que va a volcar todo el poder de la entidad para combatir “el demonio de la corrupción”, y trabajará con las demás ramas del poder para “desmontar las mafias que anidan en el Estado”. Al final de su discurso, dejó claro su agradecimiento al presidente Petro: “reconozco visión política del presidente, que ha tendido una bandera blanca de armonía, entendimiento, conversación y diálogo con el Congreso de la República”.


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Sobre la firma

Juan Miguel Hernández Bonilla
Periodista de EL PAÍS en Colombia. Ha trabajado en Materia, la sección de Ciencia de EL PAÍS, en Madrid, y en la Unidad Investigativa de El Espectador, en Bogotá. En 2020 fue ganador del Premio Simón Bolívar por mejor reportaje. Estudió periodismo y literatura en la Universidad Javeriana.
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