Al menos diez muertos durante una revuelta contra el nuevo gobernador árabe de Mosul

Las tensiones interétnicas latentes durante la dictadura de Sadam Husein comienzan a aflorar y a producir enfrentamientos en todo el país. Esta mañana, miles de personas se han congregado frente al Palacio de Gobernación de la ciudad norteña de Mosul para protestar contra la designación de un Gobernador árabe para la ciudad decidida por un consejo de líderes de diferentes etnias. Durante la revuelta ha tenido lugar un tiroteo en una plaza del centro de la ciudad en el que han muerto al menos 10 personas.

Unos ochenta soldados estadounidenses se han situado frente a los manifestantes y han efectuado disparos al aire para controlar la situación, después de que un grupo de manifestantes prendiera fuego a un automóvil frente al Palacio de Gobernación.

El enviado especial de Efe en esta ciudad ha asistido al intenso tiroteo que han efectuado los soldados norteamericanos después de que fueran blanco de disparos de francotiradores aislados apostados en varias casas cercanas y también, en algunos casos, entre grupos de manifestantes. En el caos del tiroteo han fallecido 10 personas y decenas de manifestantes han resultado heridos. Según testigos presenciales citados por France Presse, las balas que han alcanzado a la multitud que protestaba contra el nuevo gobernador fueron disparadas por las fuerzas estadounidenses.

Consejo interétnico

Después de diez minutos de tiroteo la mayor parte de los manifestantes se retiraron de las cercanías del Palacio de la Gobernación. Poco después, varias ambulancias han llegado al lugar de los hechos.

La revuelta se ha desencadenado al conocerse que un consejo de líderes de las etnias kurda, asiria, turcomana y árabe había decidido, después de una reunión coordinada por un teniente coronel estadounidense, que el cargo de gobernador de la ciudad, situada a unos 450 kilómetros al norte de Bagdad, lo ocupe el árabe Mishan al Ahari.

El sábado pasado se registraron fuertes enfrentamientos entre kurdos, y árabes que costaron la vida a veinte personas. Mosul, con más de un millón y medio de habitantes, es la principal ciudad del norte de Irak. Dos tercios de la población es árabe y el resto kurda, turcómana y cristiana.