Arafat ilegaliza al brazo armado del Frente Popular para la Liberación de Palestina

La Autoridad Nacional Palestina (ANP), que preside Yasir Arafat, ha declarado ilegal al brazo armado del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), uno de cuyos miembros asesinó ayer al ministro israelí de Turismo, el Rejavam Zeevi. Se trata de una decisión sin precedentes, con la que Arafat cede a parte del ultimátum lanzado ayer por el primer ministro israelí, Ariel Sharon, que le exigía la ilegalización de varias organizaciones terroristas y la entrega de los autores del atentado.

Esta medida, confirmada por destacadas fuentes de seguridad palestinas de Gaza, se produce al mismo tiempo que una treintena de detenciones de miembros del ala política y de activistas del FPLP en Gaza y Cisjordania.

El brazo armado del FPLP recibe el nombre de Brigada Abu Ali Mustafá, en memoria del líder de ese grupo, a quien el 27 de agosto el Ejército israelí asesinó al disparar varias bombas desde helicópteros que impactaron su oficina en Ramala. Además, el FPLP es uno de los ocho grupos que integran la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), cuyo líder es Arafat, aunque se opone al proceso de paz con Israel.

El Gabinete para Asuntos de Seguridad, presidido por Sharon, había exigido a Arafat que ilegalizara a "todas las organizaciones terroristas", así como la entrega inmediata de los asesinos del ministro de Turismo. De no cumplir estas exigencias, Israel amenazó con considerar a la ANP "un ente que apoya el terrorismo" y con actuar "en consecuencia".

Con la ilegalización del brazo armado del FPLP, la ANP cumple parte de este ultimátum, aunque previamente ha anunciado su rechazo a extraditar a miembros de esa organización. Varios ministros palestinos han explicado que, según los acuerdos de paz, ni Israel ni la ANP están obligados a extraditar a sus ciudadanos para ser juzgados en tribunales de la otra parte.

Sin embargo, han dado a entender que la ANP acepta detener a los culpables. Desde su creación, la ANP nunca ha extraditado a ningún palestino a Israel.

Además, los ministros han denunciado un plan de israel para acabar con la vida de Yasir Arafat y otros dirigentes palestinos y han pedido a EE UU que frene a Israel.

Un nuevo asesinato selectivo

Con esta decisión sin precedentes, Arafat pretende frenar la ira del Gobierno israelí, que ha lanzado una operación de represalia que ha causado tres muertos y nueve heridos en Cisjordania.

Blindados y excavadoras israelíes perpetraron una incursión en dos sectores de la ciudad cisjordana de Ramala, donde han destruido las defensas antiblindados. Dos hombres, entre ellos un policía palestino, han resultado muertos por disparos de soldados israelíes durante la operación.

Durante otra incursión en Jenín, una niña de 12 años ha resultado muerta y otros cuatro escolares y tres adultos heridos al ser disparada su escuela por tanques israelíes. Además, nueve palestinos han resultado heridos en Jenín, Ramala y Hebrón.

Para la ANP, la invasión israelí es "un intento de sabotear lo poco que queda del proceso de paz" entre ese país y la ANP. Esas incursiones "constituyen una clara violación de los acuerdos firmados por Israel con el Gobierno palestino".

Además, un nuevo asesinato selectivo ha acabado con la vida de un dirigente de Al Fatah y de dos palestinos más que viajaban con él. Según la radio estatal israelí, se trata de Atef Abayad, uno de los palestinos más buscados por Israel y que ha muerto al ser atacado con proyectiles el coche en el que viajaba junto con un familiar suyo, Yamal Abayad, y con una tercera persona, en una carretera que une Belén y la localidad de Bet Sajur.

Abayad era el jefe en Belén de las milicias armadas del movimiento oficialista palestino Al Fatah. Israel, que había pedido su extraditación, le acusaba de haber matado hace casi un mes a un colono israelí junto al asentamiento judío de Tekoa.

Esta misma noche, un ciudadano israelí ha fallecido a causa de las heridas sufridas horas antes durante un tiroteo en Jericó.