La UE promete a Pakistán su apoyo para hacer frente a la oleada de refugiados

La troika ministerial de la Unión Europea (UE) ha llegado esta madrugada a Islamabad, primera cita de una amplia gira por varios países musulmanes con el fin de atraerlos a la coalición internacional contra el terrorismo que pretende crear EE UU. En su primera reunión con el ministro de Exteriores paquistaní, Abdul Sattar, los integrantes de la delegación europea han prometido ayuda inmediata para hacer frente a las oleadas de refugiados afganos y un "paquete" de cooperación a más largo plazo.

En concreto, el Gobierno de Islamabad ha pedido a la delegación de la Unión Europea que visita el país un mayor acceso al mercado europeo para sus exportaciones textiles, Según han informado fuentes comunitarias.

Sattar ha reiterado por su parte el compromiso de su país de llevar ante la Justicia a los "autores y a los responsables" de los sangrientos atentados del 11 de septiembre contra las Torres Gemelas de Nueva York y el Pentágono en Washington.

La delegación comunitaria está integrada por el ministro belga de Exteriores, Louis Michel, en representación de la Presidencia de turno de la UE, el jefe de la diplomacia española, Josep Piqué, el Representante de la Política Exterior de los Quince, Javier Solana, y el comisario europeo Chris Patten.

Tres mensajes

Ésta es la primera vez que el jefe de la diplomacia española participa en la Troika en representación de la próxima Presidencia de la UE, que asumirá España el 1 de enero de 2002. La delegación viaja con tres mensajes dirigidos en primer lugar a Pakistán, pero que pueden extenderse a los demás países de la gira: que la lucha declarada contra el terrorismo no es contra el Islam, la necesidad de cooperar todos para cortar los recursos a esas organizaciones y la disposición a un relanzamiento de las relaciones bilaterales, señalaron fuentes comunitarias.

Piqué destacó que la gira pretende "fortalecer la puesta en marcha de una gran coalición contra el terrorismo que agrupe a países tan importantes como Arabia Saudí, Pakistán o Irán". En el caso de Pakistán, considera "imprescindible un apoyo a sus autoridades, lo que puede comportar una serie de modificaciones de lo que hasta ahora ha sido la posición común de la UE respecto a ese país".

Ello debe hacerse con el fin de "fortalecer la posición de sus autoridades para que puedan afrontar este nuevo escenario teniendo en cuenta que una parte muy importante de su población simpatiza con los talibán", ha agregado el ministro de Asuntos Exteriores en unas declaraciones a los periodistas en el avión que ha trasladado a la Troika a Islamabad.

La UE tiene prácticamente congeladas sus relaciones con Pakistán desde octubre de 1999, cuando el gobierno democrático de Nawaz Sharif fue derrocado por el general Pervez Musharraf. Al día siguiente del golpe, la UE paralizó la firma de un acuerdo de cooperación y desde entonces las relaciones eran casi inexistentes.

Refugio de terroristas

Para Solana, en esta gira hay que "dejar bien claro que la lucha es contra el terrorismo y no se trata de una batalla contra el Islam" porque los países islámicos también han sido dañados por el terrorismo. Por ello, "vamos a pedirles que se sumen a esa batalla" y que participen en "el intercambio de información y también en los intentos de evitar que les lleguen recursos a las organizaciones terroristas", ha agregado.

En el caso de Pakistán, la UE pedirá que contribuya a que la vecina Afganistán deje de ser un "refugio de terroristas" y sondeará la posible participación de Islamabad en la búsqueda de una salida política para ese país, dominado por el régimen talibán. Esa salida podría pasar por una conjunción de fuerzas entre la oposición aglutinada en la Alianza del Norte, que controla menos del 10% del territorio y que ha redoblado sus ataques contra los Talibán, y los seguidores del antiguo Rey Zaher.