Declaración completa del presidente de la Junta ante las afirmaciones de Puigcercós

Quiero expresar mi total rechazo a las declaraciones realizadas por el diputado Puigcercós, a todas sus palabras, incluso a aquellas con las que ha pretendido rectificar.

Puigcercós ha ofendido profundamente a Andalucía. Una comunidad cuyo esfuerzo ha sido clave para el progreso de España.

Exijo respeto absoluto a Andalucía. Respeto a una tierra trabajadora, honrada y emprendedora, que cumple sus deberes como la que más. Y que, insisto, ha contribuido decisivamente al progreso de España y, porque no decirlo, de manera especial al de Cataluña.

Lamentablemente no es la primera vez que tenemos que oír declaraciones de este tipo ancladas en el tópico. Pero estamos en la Andalucía del siglo XXI: una Andalucía moderna, emprendedora, innovadora, a la vanguardia en muchos sectores estratégicos.

Estas declaraciones son intolerables, por tanto, no sólo porque resultan ofensivas sino porque delatan la ignorancia de quien las ha pronunciado.

Y añado: Los andaluces no necesitamos reafirmar nuestra identidad contra nadie. Somos un pueblo que respeta profundamente a Cataluña y a los catalanes, con quienes nos unen lazos de hermandad que mantienen vivos el más de millón y medio de andaluces que residen en Cataluña.

Este nacionalismo insolidario del Sr. Puigcercós debería poder defender sus ideas desde la racionalidad de los argumentos y no desde la mentira gratuita. El señor Puigcercós debería poder defender sus ideas con su programa y no insultando a los andaluces.

Triste es que para defender una ideología se insulte a la tierra que más ha cambiado de España en los últimos años.

Hace algo más de una hora me ha llamado el Presidente de la Generalitat para expresarme su desacuerdo con las manifestaciones del señor Puigcercós, en absoluto coincidentes con el sentir general del pueblo catalán.

Reitero por tanto el total rechazo del Gobierno andaluz a estas declaraciones, intolerables en un Estado democrático en el que todos somos iguales ante la ley. Un Estado cuyo progreso se construye con la aportación de todos, también por supuesto de Andalucía.

Por último: El Gobierno andaluz rechaza estas declaraciones ofensivas para los andaluces como lo ha hecho siempre con independencia del color político de quienes las hubieran hecho.