La presión contra la deuda española se relaja tras rozar máximos

Las dudas sobre el futuro de Grecia, que debate desde hoy un nuevo plan de ajustes con más medidas de austeridad que el Parlamento debe vota el miércoles, siguen manteniendo la presión sobre la deuda española. La prima de riesgo, que marca el sobrecoste que debe pagar España por sus bonos a diez años frente a Alemania, sigue la senda al alza que comenzó el miércoles de la semana pasada y esta mañana ha llegado a tocar los 292 puntos básicos para posteriormente moderar la caída hasta situarse por debajo del cierre del viernes. La prima de riesgo española ha bajado por la tarde a los 280 puntos básicos. La subida de primera hora de hoy coincide con máximos en la rentabilidad del bono español en el mercado secundario, donde esta mañana marcaba un 5,7%, el máximo desde el año 2000.

Aunque la decisión del plan de ajuste de Grecia no se tomará hasta el miércoles, los mercados están pendientes de cualquier gesto relacionado con Grecia, y con su deuda. En este caso, el alivio se ha producido después de que se conociera que los bancos alemanes y franceses, los que tienen una exposición más fuerte de la deuda griega, están dispuestos a participar en el segundo rescate de Grecia.

El Gobierno español, según ha reconocido esta mañana la vicepresidenta económica, está preocupado por la situación, pero no inquieto. "Todos estamos esperando a ver qué pasa mañana en Grecia", ha explicado la titular de Economía en una entrevista a TVE. "Hasta que no se produzca la votación del Parlamento toca tensión en los mercados, una tensión que se traslada a los valores de la Bolsa y a los títulos de deuda", ha añadido antes de admitir que, dado a las dudas motivadas por este país y la incertidumbre sobre el euro, el acoso contra España medido en términos de prima de riesgo puede marcar nuevos máximos en las próximas horas.

Sin embargo, la ministra de Economía ha querido matizar que el país no va a estar en el límite de rescate y que el Tesoro se sigue financiando bien y con una alta demanda a través de las emisiones de deuda, que "es lo realmente importante", ha defendido. "España sigue en el punto de mira, pero mucho menos que en los meses pasados", ha insistido Salgado antes de, a modo de ejemplo, destacar que durante las cumbres en Bruselas de la última semana sus colegas europeos no le preguntaron sobre la situación del país. "Saben que estamos haciendo las reformas", ha explicado. Aunque, eso sí, a "los mercados hay que explicárselo todo los días", ha concluido.

Grecia sigue marcando la evolución de los mercados. Los 300 diputados del Parlamento comienzan hoy el debate de las nuevas medidas de ajuste, que pasan por la aplicación de nuevos recortes en sueldos y pensiones, y a nuevos impuestos por un volumen total de unos 6.500 millones de euros hasta 2015. En un ambiente de crispación política, con la oposición en contra de la aplicación de nuevas medidas, y crispación social, los dos grandes sindicatos del país han convocado una huelga del sector público y privado para mañana y pasado.

La presión sobre la deuda no se localiza solo en España, en Italia la presión también ha hecho aumentar su prima de riesgo, que ha alcanzado máximo en los 216 puntos.

La jornada en la Bolsa está marcada por la volatilidad. El Ibex 35, tras comenzar la jornada en tablas ha vuelto a las pérdidas por debajo de la cota de los 10.000 puntos. Ha cerrado la sesión con ganancias, un 0,61%, después de que se haya relajado la presión sobre la prima de riesgo española.

En el resto de las principales Bolsas europeas también se siente la incertidumbre sobre el futuro de Grecia. En París y Alemania la sesión ha comenzado con ligeras pérdidas, París baja un 0,13%, Fráncfort lo hace un 0,31%. Por su parte, en Londres y Milán registras leves ganancias.