Lunes de fuertes pérdidas para el Ibex y el Dow Jones
El Ibex se deja un 4,12% castigado por la banca y registra la tercera mayor caída del año en un lunes de pérdidas en toda Europa.- El Dow Jones se deja casi un 4%, empujado por las las malas noticias en el sector del automóvil
Poco le ha durado la alegría al Ibex 35, que el viernes de la semana pasada rompió el idilio con las subidas y abandonó el rally alcista que mantuvo durante 12 días y hoy a protagonizado otro de esos lunes negros que parecían olvidados, aquí y en todo al otro lado del Atlántico. Las bolsas europeas han apostado desde el principio por el rojo (un 2,23% para el selectivo español en la apertura) y el Ibex se ha abonado a las pérdidas empujado sobre todo por el sector bancario, de nuevo el más afectado por las noticias de los últimos días y, en especial, por la decisión del Banco de España de intervenir Caja de Ahorros de Castilla-La Mancha (CCM).
A pesar de cierta recuperación al final de la mañana, la jornada ha terminado como empezaba: con fuertes pérdidas, acentuadas en el caso español a partir de la apertura de un Dow Jones al que el Ibex se ha confiado demasiadas veces en las últimas semanas. Sin duda, algo más que la jornada de correción que esperaban muchos inversores.
Al final el selectivo español ha sufrido la tercera mayor caída del año, un 4,12%, para quedarse en 7.601 puntos, en una jornada marcada por la evolución, de nuevo, de los principales bancos, al frente de las caídas entre los grandes valores. Así, el Santander se ha dejado un 7,68%; BBVA un 7,74% y el Popular más de un 6%. Por su parte, Telefónica el valor con más peso del selectivo, se ha dejado un 1,60%, Repsol YPF, el 4,14%, a pesar del anuncio del descubrimiento de nuevos pozos e Iberdrola un 5,16%.
Tampoco se han comportado mejor el resto de los valores, con sólo dos en positivo: Fenosa y Gas Natural. Las constructoras tampoco han tenido una buena jornada y, de hecho, las pérdidas han sido lideradas por Acciona, que se ha dejado más de un 8%.
Vuelve la desconfianza a Wall Street
El Ibex se ha visto arrastrado por la apertura en rojo de Wall Street, donde el Dow Jones ha llegado a perder el 4%, con General Motors liderando las caídas (perdía más del 20%), para quedarse en un 3,21% a pocos minutos del cierre en Nueva York. El miedo y la desconfianza han vuelto a la bolsa neoyorquina, tras 20 días de recuperación más o menos constante, en este caso por la preocupante situación de la industria automotriz y más en concreto de General Motors. El gigante del automóvil se encuentra al borde de la quiebra y es el más afectado por el plan de ayudas presentado por el Gobierno de Barack Obama, que eleva el listón de las exigencias para las empresas del sector que quieran ser rescatadas.
En Europa, también ha pesado en el ánimo de los inversores la publicación del índice de confianza empresarial en la UE, que ha vuelto a caer en marzo por noveno mes consecutivo hasta alcanzar un nuevo mínimo. En el resto del continente, con el euro a 1,313 dólares, el CAC-40 parisino ha caído un 4,27%, el Dax alemán un 5,10% y el FTSE 100 de Londres un 3,49%.
La entidad hipotecaria Nationwide comprará la mayor caja escocesa
La entidad hipotecaria Nationwide Building Society comprará Dunfermline, la mayor caja de ahorros escocesa que fue puesta a la venta el fin de semana tras registrar pérdidas millonarias, ha informado hoy el Banco de Inglaterra. Nationwide se hará cargo de los depósitos, sucursales, sedes centrales y del área de hipotecas de Dunfermline, institución con una antigüedad de 140 años que quebró hace unos días.
El acuerdo, alcanzado tras unas negociaciones encabezadas por el banco emisor inglés, supondrá que unos 530 trabajadores de Dunfermline pasarán a trabajar para Nationwide. El Banco de Inglaterra ha puntualizado que "todo seguirá como siempre para los clientes" y ha tranquilizado a los ahorradores.
Durante el pasado fin de semana, el Banco de Inglaterra, la Autoridad de Servicios Financieros (FSA) y el Gobierno británico, que juntos regulan el sector, optaron por ofrecer la entidad al mercado tras descartar nuevos planes de ayuda. Poco antes de confirmarse la compra, el presidente de Dunfermline, Jim Faulds, manifestó su decepción por que el Gobierno no respaldase a la entidad para que ésta pudiera continuar operando en forma independiente. "Nationwide hará todo lo que pueda por mantener el empleo", dijo antes de puntualizar que él y toda la administración de la caja "trabajaron incansablemente" para proteger al personal.
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